Mı turno

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Es algo muy cabreado hablar en voz alta

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Es algo muy cabreado hablar en voz alta.

¿Qué es lo que quiero?

¿Qué es lo que deseo en un futuro?, la ideología de crear un futuro imaginativo con la chica que crees amar, es... ¿Qué es? ¿Creer que pensar y planear está bien? Está bien lo que pienso, lo que espero y quiero que pase con ella o simplemente... ¿Espero que las cosas fluyan y se den de la mejor manera?

Lo mejor que podría hacer es seguir viviendo los momentos y dejar de planear.

Llegamos hace unas 4 horas y lo primero que hicimos todos, fue irnos a dormir a nuestras respectivas habitaciones asignadas, no estoy nervioso en lo absoluto no es la primera vez que ella y yo dormimos juntos o que estamos juntos en una cama, pero por alguna razón el hecho de estar juntos en compañía de amigos me resulta nuevo.

Me encuentro sentado en la cama con ella encima mío abierta de piernas lista para más pero solo esta recostada en mi pecho y yo solo la abrazo haciendo un lado mis pensamientos totalmente calientes a quien los lea.

Se encuentra con el pijama de ceda delgada y suave que solo cubre lo necesario y deja a la vista sus pezones que se hace duros cada vez que paso mis labios a su cuello.

—Pasa algo —me pregunta al despertar.

—Nada amor. —Le doy un beso en su frente y continúo abrazándola.

Podría estar con ella de esta manera y no me cansaría.

Sale de mi agarre y se dirige a su bolso en busca de su frasco de fármacos

—¿Ya te toca? —Pregunto y ella solo asiente con la cabeza.

Me dirijo rápidamente a la cocina en busca de un vaso de agua y noto que no hay nadie en la casa y que lo más seguro es que todos estén encerrados o rondando por ahí, regreso y ella se encuentras sentada esperando, nota mi presencia y prosigue a toma la primera, le paso el vaso para que no le cueste trabajo dirigirla

—Listo—toma mi mano y caminamos juntos a la cama, me sienta en esta y empieza a besarme con desespero y pasión.

Me recuesto en la cama con ella encima mío moviéndose, dejando besos húmedos en mi cuello y torso.

Se quita el pijama quedando con solo unas pequeñas bragas de encaje blanco, dejando al descubierto sus hermosos atributos que devoró al instante, me concentro en sus pechos mordiente uno por uno.

Sin ser tan brusco, pero tampoco tan tierno, ella continúa moviéndose encima mío como si me estuviera cabalgando, yo solo siento como mi miembro empieza a elevarse, ella gustosa no para, al contario parece agradarle.

La aparto con cuidado para quitarme el pantalón de pijama quedando en bóxeres, me jala a la cama quedando ella bajo de mí, no parece gustarle ya que se incorpora nuevamente encima mío.

—Te necesito...—Suelta un leve quejido que eleva mis niveles de entusiasmo a un 100% .

La coloco nuevamente debajo de mi.

Busco Un Giro Interesante [#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora