Busco Un Giro Interesante [#1]

Lαs despedıdαs duelen

Lucα

Me pesa la cabeza y el cuerpo.

Llevo semanas enteras con el pesar de la universidad sobre mis hombros. Tuve la oportunidad de terminar un año antes la carrera por adelantar lo más que podía en los módulos.

Estoy dando las últimas vueltas para recibir mi título universitario, que me ha costado horas de estudio intensivo.

No tengo noción de tiempo, solo sé que me he distanciado de ella.

Por alguna razón siento que las cosas ya no son como antes, ya nada lo es.

Para bien o para mal. Me está cansando tener que aguantar el pesar de sus problemas emocionales sobre mí.

La amo, pero no echaré a perder oportunidades importantes como estas para estar detrás de ella, así como ella tiene cosas "importantes" en su vida yo también, mi carrera en estos momentos es más importante que sus llantos a mitad de la noche y sus pesadillas.

Simplemente ninguno de los dos podía dormir tranquilo por ella misma.

Todo entre nosotros iba bien, un día solo deje de sentirme tranquilo con su mera presencia.

Ya no había tanta felicidad como antes, tomo estaba marchando mal o simplemente me encontraba completamente confundido. ¿Realmente la amo?

¿Estoy dispuesto a seguir siendo el hombro en donde llorara todas las noches por las pesadillas en las que no encontraba razón alguna? ¿Estoy dispuesto a sacrificar mas de mi en esta relación?

Un día entendí. Habíamos visto un maratón de películas terror. La siguiente noche fue un maratón de documentales paranormales. Era entendible al principio y en un cierto gracioso. Ella es muy temerosa y entendí cada uno de sus motivos para abrazarla noche tras noche. Era de cierto modo romántico poder dormir con ella; abrazarla, acariciarla, besarla sin sobrepasarnos los limites puestos de ambos.

Las noches siguientes ya no había escusa exacta de lo que pasaba. Era imposible para ella y para mi conciliar el sueño.

Sus días buenos habían acabado y eran nuevamente terribles pesadillas de las que no quería contarme.

Quise ayudar. Una y otra vez estuve para ella ayudándola, haciendo todo para que descansara, quise escucharla, pero solo lloraba, no quería hablar conmigo del porque lloraba o que era lo que le molestaba.

Yo ya no podía cerrar los ojos por estar al pendiente de ella. Hasta que el cuerpo me gano, mis ojos simplemente se cerraron era algo obvio llevaba semanas sin dormir bien, entre la escuela y estar al pendiente de Afrodita.

Se me acaba la energía.

Desperté y no había nadie en la cama, por un momento supuse que estaría en el balcón de su habitación en donde siempre estaba, todas las mañanas observando el jardín y las flores que su madre sembró antes de marcharse.

Fui al baño y ahí estaba ella. Estaba en el rincón de su tina con las muñecas cortadas y los recuerdos de hace unos años se apoderaron de mi mente.

Me dolió verla así.

Se veía como antes.

Sentí como si un balde callera sobre mí. Saber que, se supone que ella es feliz con su vida y conmigo.

Sus acciones son contrarias. Sus actos son otros, sus palabras solo fuero. "No sé cómo paso", "Solo quise desahogarme"

¿Desahogarse de qué?

Ella era consciente de eso. Era consciente del daño que se hacía y que me hacía al lastimarse. Se suponía que para eso es una jodida relación para ayudarse, para protegerse mutuamente. Pero es todo lo contrario, todo esto se volvió una mierda.