ᴅíᴇᴢ: atardecer

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—¡Detente!

—¡Sé a lo que vienes! —Gruñó.

—¡Entonces deja de caminar! —Se detuvo en medio del pasillo. Zayn la tomó de la muñeca llevándola lejos de la vista de los otros.

La llevó al salón más cercano, no dijo nada esperando que ella se explicara. Pero ella miraba el techo con sus brazos cruzados sobre su pecho buscando alguna salida fácil.

Nada más que la verdad pasaba por su cabeza. Bufó molesta, pero consigo misma, porque sabía que el omega no tenía la  culpa de nada.

—Ya lo sé. Está mal.

—¿Entonces por qué lo haces?

—¿Tengo alguna otra solución?

—¡Dejarlo!

Negó. —Sabes que no lo haré. Él tiene que irse.

—¡Sabes que no lo hará! — Se acercó poniendo sus manos sobre los hombros de Dayana mirándola a los ojos. —Dime que es lo que pasa, Day.

—No pasa nada. Eres tú haciéndote historias en tu cabeza.

—Sabes que eso no es así, sabes que hay algo más. —Dayana quitó las manos de Zayn encima suyo dándole la espalda.— Jamás te juzgaría.

—Lo sé, Zayn. —Dio media vuelta volviendo a su posición del inicio. —No te voy hacer el cuento largo, me vendieron al mejor postor que pudieron encontrar. En este caso la familia Salvatore.

—Se más clara, Day. No entiendo.

—La hija de los Salvatore siempre ha estado enamorada de mí según lo que dicen mis padres. Ellos para hacer el trato lo mejor posible le pusieron un precio a lo nuestro. Al terminar mis estudios me casaré con ella.

—¡No pueden hacer eso!

—No es algo que les importe, no cuando el contrato ya ha sido establecido. —Lo decía como si no importara, como si se tratará de un juego de niños. Cuando la realidad era que pasaría el resto de su vida al lado de alguien que no quería.

Con alguien que no había elegido.

Zayn negó acercándose. —Eres mayor de edad. Puedes negarte.

—El contrato no es de hoy, Zayn. Ya es muy tarde para eso, quitando el hecho de que ya se han gastado todo el dinero que les dieron.

—Pero Dayana, no sólo te harás daño a ti, sino a Eric. —No encontraba una solución, nada de lo que pasaba por su cabeza giraba entorno al futuro de su amiga. Sino al omega al cual rompería.

—El dolor es una prueba emocional por la que todos debemos pasar.

—¿Prueba emocional? ¿De qué mierda hablas?

—¡Todos sufrimos para ser felices!

—No funciona así.

—¡Claro que sí! —Exaltó —¡Contigo está más que claro! Ha llegado Liam hacerte feliz, ¿No?

—Liam y yo no tenemos que ver con esto. No cambies las cosas, Dayana —Se intentó acercar, pero ella se hizo hacia atrás negando.

—Sigue siendo parte de lo mismo. —Murmuró —Después de mí llegará alguien que lo valore.

—Podrías ser tú si te decides hacer las cosas bien. Ya eres mayor de edad, puedes buscar una solución, yo te apoyare en todo.

Ella negó, le dolía pero no lo demostraría para satisfacer a Zayn. —Yo seré feliz con o sin el contrato.

𝐀𝐋𝐅𝐀 𝐘 𝐎𝐌𝐄𝐆𝐀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora