Hades.
-¿En que piensas?- Pregunta Lauce con una sonrisa mientras peina mi cabello. Me gusta estar así, acostado con mi cabeza apoyada en sus piernas mientras ella se encarga de consentirme.
-Nada importante- Miento...o...¿tal vez no?. Llevo meses pensando en lo que podría significar esas escenas que vienen a mi mente pero no logro saber que quieren decir. Por días trate de encontrarles algún sentido o incluso tratar de recordar si era algo que había sucedido hace mucho pero solo terminaba con una horrible jaqueca.
-Estas bastante tenso. ¿Seguro que estas bien amor?- Pregunta preocupada, su rostro mostrándose inocente y puro como si aún fuese una niña.
Al ver a Lauce no puedo dejar de sentirme feliz pero cada vez que la veo, un sentimiento de tristeza y angustia me llena, es como si algo malo fuera a pasar. Es extraño, siento que todo esto es...raro...pero me hace feliz aunque al mismo tiempo me siento...vacío.
-Estoy de maravilla.
No puedo decirle la verdad, no se como decirle que me siento extraño cuando estoy con ella, que es como si no tuviese que estar allí en ese preciso mentó y lugar y que ella no debería estar allí.
-Mmmm- Me observa curiosa para luego agregar. -¿Es porque te mordí?.
-No.
"A la mierda le advertimos que lamiera como paleta no que lo mordiera como si fuese bombón". Se enoja mi subconsciente al recordar el intento fallido de felación que Lauce se propuso a hacer. Había dolido bastante pero no pude enojarme con esa inocente y hermosa carita.
-¿Quieres que nos demos un baño?.
-No- Me limitó a responder aún con el extraño sentimiento se vacío, algo me falta pero...¿Que es?.
-¿Quieres recoger algunas flores?.
Me siento de inmediato al oír esas palabras pues una clara imagen de una corona de flores viene a mi mente, no se quien sea aquella chica que las porta pero jamas puedo verla por completo, solo veo ciertas partes como sus ojos grandes y llenos de un brillo que demuestra inocencia, en otras ocasiones son su labios suaves, rosados y carnosos que me hacen querer besarlos, después de pensar en todo eso un fuerte dolor de cabeza me invade al igual que un horrible sentimiento de soledad.
-¿Hades?.
-Lo siento hermosa, es solo que tengo mucho trabajo asi que debo marcharme pero por favor...disfruta de los Elíseos.
Le doy un beso lento, un beso que consiste en un roce de labios pero me separo ante otra imagen que me llega de repente y algo con el sabor de la miel.
-Adiós.
Llego a mi oficina y empiezo a buscar información acerca de una ninfa de las flores pero ninguna encaja con la descripción o al menos con los pocos rasgos que vienen a mi mente.
-Tal vez no es una ninfa pero...¿existen diosas de las flores?.
Investigo sobre esas diosas pero tampoco logro encontrar nada aunque si sentí una horrible punzada en el pecho al ver la foto de Demeter. En mi cabeza resuenan gritos de angustia y preocupacion pero no logro recordar en que momento pasaron.
-¿Señor?.
Veo que Thanatos me observa con preocupación y supongo que debe estar llamándome desde hace mas de un rato. Lo veo a los ojos tratando de transmitirle mi angustia y al parecer lo logró pues sin pedir permiso alguno camina hacia mi y coloca su mano en mi frente.
-¿Esta bien?, tiene algo de fiebre.
Me sorprendo ante aquello y al revisar mi temperatura confirmo que efectivamente tengo fiebre, ¿que me esta pasando?. Thanatos se mantiene junto a mi con sus manos atrás de la espalda y su mirada fija en lo que estaba investigando.
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ACADEMIA DE DIOSES
SonstigesEl amor no es exclusivo, incluso la persona mas fria e indiferente puede sentir un amor tan puro y sincero que no puede comprender como pudo vivir hasta entonces sin amor