¿Que hay entre nosotros?

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Hades.

Llegamos a la discoteca en donde encontramos a todos bailando y disfrutando de las jóvenes ninfas que no se molestan en apartar a los jóvenes manoseadores.

-¿Quiere bailar hermosa?- Le pregunta a Kore, un chico de piel blanca y cabello azul celeste posiblemente un hijo perdido de alguno de mis hermanos.

-Claro- Responde ella mientras se dirige con él a la pista de baile.

"Esto me hará reir".

Me siento en la barra mientras saco mi libro y empiezo a leer hasta que levanto la mirada para ver a Kore quien como lo imagine no sabe bailar este tipo de musica tan sensual, el chico se nota incomodo y yo me río tratando de no hacerlo demasiado fuerte.

-Esta haciendo el ridiculo- Dice Poseidon mientras se sienta a mi lado con una lata de Coca Cola.

-Lo se, me divierte- Agrego mientras observo los torpes movimientos de Kore y al chico tratando de apartarse pero ella no se lo permite ya que lo abraza con fuerza por la cintura.

"Mierda".

El chico esta tan avergonzado que trata de safarse de Kore pero al ver que esta no lo suelta la empuja con demasiada fuerza haciendo que caiga al suelo. Me levanto y me acerco a arreglar la situación pues no quiero que mis estudiantes armen una escena.

-¡Maldito idiota, bastardo!- Le grita Kore al tiempo que se levanta.

-¡Lunática sin ritmo, pense que valdría la pena invitarte a bailar pero ya vi que eres mas tiesa que una varilla!- Agrega al tiempo que se cruza de brazos dispuesto a marcharse.

-Oye, no es de caballeros hablarle asi a las damas- Protesto mientras me ubico junto a Kore.

-Esta no es una dama es un estúpido cadáver que no sabe moverse y solo te hace quedar en ridiculo...

Un puñetazo de mi parte en su mandíbula hace que el chico caiga al suelo mientras yo me limito a observarlo con enfado.

-Tienes razón, ella no sabe moverse, no sabe griego, no sabe vestir, no sabe bailar, no sabe usar sus poderes...no sabe muchas cosas- Digo mientras lo tomo del cuello de la camisa y lo levanto hasta que sus pies dejan de tocar el piso y mi mirada cargada de odio esta a escasos centimetros de la mia. -Pero tampoco sabe cuando rendirse, es perseverante, graciosa y sencillamente una de las pocas diosas que no son unas divas asi que la respetas o tendré que enseñarte a respetarla...pidele perdón- Ordeno al tiempo que lo arrojo al suelo y él cae de rodillas frente a Kore.

-Pe...perdón- Dice aun arrodillado y con la cabeza agachada.

-Buen chico, ahora pierdete antes de que borre tu miserable existencia del cosmos- Advierto y él chico se levanta para luego marcharse rápidamente.

-No tenias porque haber interferido- Me regaña Kore mientras se cruza de brazos y empieza a caminar hacia la barra pero yo la detengo.

-No podía dejar que insultaran asi a una chica como tu...ven a bailar conmigo- Pido y ella me observa insegura.

-¿No te asusta que te humille o avergüence?- Inquiere al tiempo que yo la tomó de la cintura haciendo que estreche su cuerpo contra el mio.

-Nunca me importo el que dirán además puedo matarlos o castigarlos si me place- Agrego restándole importancia mientras muevo sus caderas de tal forma que por su baja estatura sus senos se estrechan contra la parte media de mi vientre.

Bailamos asi por un rato con musica que hacia que nuestros cuerpos se estrecharan mas, Kore siguió moviéndose de manera torpe resultandome divertido, las personas nos miraban y se reían por lo bajo y cada vez que Kore se sentía insegura la obligaba a verme a mi y no a la porquería que había a nuestro alrededor. Al terminar la musica, nos dirigimos a la barra en donde nos encontramos a Poseidon y a Zeus bebiendo unas copas de licor.

ACADEMIA DE DIOSESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora