No puedo elegir

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Dakota estaba petrificada, no quería ni pensar en lo que significada. Dafne no estaba mejor que ella, a diferencia de su amiga ella si conocía todos los aspectos de los hombres lobos. Dakota siempre entreno solo conociendo las debilidades de toda criatura sobrenatural que existiera, ella igual pero estaba fascinada con los lobos y ella aprendió todo respecto a ellos, incluso lo que significaba encontrar a sus almas gemelas, y sabía a ciencia cierta que aunque no era muy común, en algunos casos se daba el hecho de que dos machos reclamaran a la misma hembra o viceversa. 

Sabía que la vida de su amiga acababa de complicarse más de lo que le hubiese gustado, lo peor de todo era que esos lobos no eran lobos comunes, sino un alfa y un  beta.

Los lobos eran celosos y posesivos con sus mates, los machos mucho mas pero en un beta era mas intenso y ni que pensar en un alfa, se volvían prácticamente irracionales.


Jef- Vengan, entremos a la casa. Están cansadas y deben estar hambrientas - dicho eso procedieron a entrar.

La casa era como una cabaña mansión en medio de un bosque verde, arboles rodeaban todo el lugar, simplemente bello.

Dta- Quienes viven aquí?

Jef- En la casa de la manada siempre vive el alfa, el beta y el delta principal, todos ellos con sus familias.

Daf- Con razón es tan grande, es muy bella. Parece sacada de un cuento de Hadas.

Jef rió bajo y agradeció, se dirigieron derecho a la cocina, allí había una señora mayor y tres jóvenes de la edad de veinte y veinticinco años aproximadamente.

Jef- Nana déjame presentarte a Dakota y Dafne, ellas se quedaran unas semanas con nosotros, quiero que las ubiques lejos de las habitaciones de Andrew y Jared. Y por favor prepárales algo de comer - después se dirigió a Dakota - Coman tranquilas que luego Nadia las acompañara a sus habitaciones - después se retiro. Quería saber como estaba su hijo.

Nana- Un gusto conocerlas, puedo ver que son de los clanes de cazadores, enseguida les preparo algo sabroso para que coman. Se ven tan cansadas - dijo de forma cálida y acogedora, se notaba que era muy buena.

Daf- Así es, es un gusto conocerla.

Dta- Muchas gracias la verdad estamos hambrientas - dijo casualmente tratando de olvidar lo sucedido momentos atrás.

???- Hola - saludo una joven - Mi nombre es Nadia, ellas son Ayelén pero le decimos con cariño Aye, y ella Mary - señalando a cada una respectivamente.

Daf- Un placer conocerlas, espero que mientras estemos aquí seamos grandes amigas - dijo eso dándole un codazo a su amiga, sabía de sobra que era una solitaria y si ella no la ayudaba jamás haría algún amigo en la manada.

Dta- Un gusto conocerlas - dijo sinceramente.


Después de cenar amenamente todas ellas en la cocina, Nadia las guió a sus habitaciones, se pregunto porque el alfa Jef le ordeno ubicarlas lejos del ala familiar de la casa pero no preguntaría.

Una vez acomodadas en sus cuartos, Dafne fue a bañarse y prepararse para ir a dormir. Dakota después de su baño no podía dejar de pensar en los jóvenes lobos, estaba segura de que comenzaba a tener sentimientos por el joven alfa, pero desde que el rubio la beso, aún sin su consentimiento no dejaba de pensar en él también. Mientras practicaba con su katana escucho que alguien llamaba a su puerta. Al abrirla vio que era el alfa Jeffrey y su beta, que aún no sabía como se llamaba.

Jef- Perdón pequeña, podemos pasar? queremos hablar contigo no como lobos de manada sino como padres.

Dakota estaba confundida pero accedió y les hizo señas para que entraran, su habitación tenia un pequeño sillón y un escritorio con una silla así que los tres se ubicaron ahí.

Jef- Primero que nada déjame presentarte a mi beta John, John ella es Dakota.

Jh- Un gusto conocerte al fin, tú padre nunca deja de hablar de ti.

Dta- Muchas gracias, el gusto es mío.

Jef- Pequeña, estamos aquí para hacerte saber algunas cosas, lo que sucedió cuando llegamos cambia todo a lo que veníamos. Sabes lo que significa una compañera para un lobo, verdad?

Dta- Si, en la base el alfa Jerome me explico.

Jef- El alfa Jerome? que extraño. Bueno al punto entonces, en muy raras ocasiones una mujer puede tener dos mates, o un hombre tener dos hembras, es su olor lo que nos indica a nosotros quien es nuestro ser destinado, es un olor único que solo pueden percibir las almas gemelas. Mi luna, ella tiene el olor de rosas y caramelo y solo yo lo percibo.

Jh- Para mi, el olor de mi estrella es frutos rojos y bosque de pinos. Mi estrella al igual que tu es humana, la conocí un día que fuimos a la ciudad para ver unos negocios de la manada, quede intoxicado por su esencia, me volvía loco tener que conquistarla. Si hubiera sido una loba ambos percibimos el olor y la cercanía del otro y el vínculo se crea al instante. Pero con ella fue totalmente diferente, al final después de muchos meses la conquiste y me dio cuatro hermosos hijos, Jared es el mayor.

Dakota sonrió ante tal comentario.

Jef- Te decimos esto para que sepas que ahora las cosas cambiaron, tanto Andrew como Jared te sienten como su hembra, sus lobos se los dicen y tu aroma los embriaga, el punto es que sin darte cuenta con el primer beso creaste el vínculo con Andrew y Jared lo creo cuando te beso al llegar aquí.

Dta- Ósea que el vínculo de compañeros lo tengo con los dos??- dijo temerosa.

Jh- Así es, puedes aceptar ser hembra de los dos o rechazar a uno o ambos, pero ten en cuenta esto, al que rechaces se volverá inestable y su lobo morirá de tristeza o puede volverse salvaje y violento, imagina ver a la mujer que ama en brazos de otro y no poder tocarla. Ellos ya crearon el lazo que los une a ti, ellos no verán a otra que no seas tu, ellos, aun cuando sea difícil de comprender para ti te aman mas que a la vida misma.

Dta- Yo no puedo elegir a uno y rechazar a otro si esas son las consecuencias - dijo parándose de la silla y en forma agitada - No puedo lastimar a uno de ellos, yo no podría. No puedo elegir.

Jef- Entonces elige a los dos. Nadie te juzgara por eso, como te dije no es común pero no es inusual. Incluso aquí en la manada tenemos un caso pero es invertido al tuyo. Dos lobas con un humano, también un cazador.

La joven estaba abrumada por todo lo que debía asimilar, no tenía idea del amor y apenas se hacía a la idea de estar en una relación con el lunático que ahora también tenia al acosador.

En ese momento solo tuvo un pensamiento en mente.

¨¨Como no me quede en oriente¨¨



Si, otro capitulo. Cada vez me emociona mas escribir. Este cap se lo dedico a tres mujeres que están siempre en mi vida, sus nombres están en el capi. Para ustedes, las amo.

Meli



El Alfa, El Beta y la CazadoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora