BEHIND CLOSED DOORS 2 | DRACO MALFOY ✓

𝟑𝟎. 𝐒𝐎 𝐓𝐇𝐈𝐒 𝐈𝐒 𝐑𝐈𝐂𝐇

AnnaLeigh Malfoy.

—¿Lista?.—Draco preguntó mientras arrojaba una maleta vacía por las escaleras, continuó con los golpes mientras la caja golpeaba cada escalera hasta que aterrizó a mi lado.

Me estremecí y comencé a mirar el caso por un momento antes de mirar por la ventana.

—¿Y si ella-

—Ella estará aquí.—Draco estaba ahora a mi lado, su voz tranquilizadora sonaba en mi oído.—Ella sigue siendo tu mejor amiga, así que tuviste una pequeña pelea... sucede.

—No es la pelea, es sólo que Draco, ella tenía razón. Todo lo que dijo. Estaba tan absorta en mí misma que ni siquiera sabía que estaba embarazada... ¡Debería saber estas cosas!.—Dije mientras suspiraba y dejaba caer mi cabeza al suelo.

—Ahora tienes una familia, Anna. No puedes culparte por tener demasiado en tu plato. Kehlani está tan estresada como tú y simplemente espetó... cariño, no lo decía en serio.—me aseguró, colocando una mano en mi hombro. Levanté mi cabeza y puse mi mano sobre la suya.

—Espero que tengas razón.—susurré. Se inclinó más cerca de mí, su nariz tocando mi mejilla mientras sus labios pasaban por mi oído, sabiendo muy bien la tensión que estaba creando.

—Siempre la tengo.—Sonrió con arrogancia y enarcó una ceja. Dejé escapar una pequeña risa cuando me di cuenta de lo mucho que había inflado su ego.

—Por favor, cállate.—me reí mientras se lamía el labio inferior y ladeaba la cabeza.

—¿Me acaba de decir que me calle? Oh, se arrepentirá de eso Sra. Malfoy.—sonrió mientras se inclinaba para besarme.

—¡Hola! La puerta trasera estaba abierta, no estén en un mal momento.—Me aparté lentamente y miré hacia atrás para ver a Kehlani con sus maletas.

—Lani—

—Lo siento, puedo oler la intimidad. Como un Thestral con... uh, sangre.—Se rió mientras dejaba caer su bolso al suelo.

—Voy a agarrar a Elora.—susurró Draco mientras me daba un pequeño beso en la sien antes de dejarnos a Kehlani y a mí solas.

Nos quedamos allí en un incómodo silencio, en lados opuestos de la habitación, desafiándonos la una a la otra a decir la primera palabra. Finalmente reuní el valor y di un paso adelante, aclarándome la garganta para hablar.

—Lo-lo siento.—dijo Kehlani antes de que tuviera la oportunidad de decir una palabra. Ella no me miró, sólo al suelo.—Pasé por encima de una línea que no debería haber hecho, eso no significa que lo que dije no fuera cierto, pero sé que no es tu culpa. Tienes mucho que decir, tienes una familia y pronto yo también—

—Lani, detente.—dije mientras ella dejaba de divagar y finalmente me miraba.—Tenías razón. Eres parte de mi familia y no debería haberte hecho eso.

—Bueno, maldita sea, maldita perra.—se rió mientras una gran sonrisa se dibujaba en mi cara.—Ven aquí.

Me reí mientras ella me envolvía en un gran abrazo, Uno que ambas necesitábamos. Nunca tuvimos tantas peleas y cuando las hicimos eran tontas y pequeñas, como esta, pero descubrí que los verdaderos amigos son los que regresan de las peleas, hacen un esfuerzo por disculparse y arreglar la amistad y los que no. , nunca me gustó de todos modos.

—¿¡Ahora vamos a Fiji o qué!?.—Ella se rió mientras yo me apartaba y sonreía.

—¿Sabes por qué vamos, verdad?.—Le pregunté mientras suspiraba y ponía los ojos en blanco.

—Sí, sí, para que Draco pueda matar a Scorpius, pero eso no significa que no podamos pasar un buen rato. Estoy embarazada y tú estás comprometida con una niña, pero todavía estamos calientes.—dijo, con una sonrisa burlona. está en sus labios.

—No sé cómo espera encontrarlo. Podría estar en cualquier lugar.—Rodé los ojos.

—Es Draco, tiene una forma de hacerlo todo. Mi pregunta es ¿cómo vamos a llegar allí?.—Preguntó Kehlani cuando mis ojos se abrieron y le tapé la boca con una mano.—¿No se negó?.

—¡Un avión! ¡Me está haciendo tomar un maldito avión muggle!.—Escuchamos a Draco gritar desde arriba. Kehlani apartó mis manos de su boca y se echó a reír.

—No tienes idea de lo envuelto que lo tienes alrededor de tu dedo meñique.—Ella resopló mientras yo ponía los ojos en blanco.

—Bueno, cuando te ves así...—Moví mi cabello hacia un lado y fruncí los labios.—Puedes hacer cualquier cosa.—Solté una carcajada.—Oye, ¿Albus va a venir?.— desde que le revelé accidentalmente el embarazo de Lani, estaba tan asustada que arruiné su relación.

—Sí. Lo crea o no, pero en realidad no podría estar más emocionado de ser padre.—dijo mientras yo levantaba una ceja.—Fue un shock para él cuando lo dijiste, pero lo aceptó.

—Wow... me alegro.—Parpadeé antes de sonreír lentamente.

—Está bien, está lista.—Draco bajó las escaleras con Elora envuelta en mantas en sus brazos.

—Ella no las necesitará a todos, Draco.—Me reí y negué con la cabeza. Parecía un burrito cuidadosamente envuelto.

—Primero, si, ¿que carajo es un burrito?, y segundo, ella estará bien. Tenemos un vuelo de 23 horas por delante.—dijo mientras yo arrugaba la nariz y ponía los ojos en blanco al darme cuenta de que me había leído la mente.

—Segundo eso... ¿qué es un burrito?.—Preguntó Kehlani mientras negaba con la cabeza y soltaba una carcajada.

—No te preocupes por eso, vamos.

[...]

—Tienes que estar bromeando Draco.—mi boca se abrió mientras salía del auto con Elora en mis manos. Estuvimos en el aeropuerto, pero no con todos los demás.

—Ya es bastante malo que me hagas estar en un avión, estaré maldito si tengo que ir con uno lleno de muggles.—puso los ojos en blanco mientras le agradecía al conductor y comenzaba a caminar hacia el jet privado que estaba frente a nosotros.

—Bebé, ¿por qué te quejas? Él tiene ese dinero.—Kehlani sacó la lengua y sonrió.

—Sí. ¿Qué esperaba?.—Murmuré para mí misma en voz baja mientras volvía la cabeza y miraba al conductor sacar las maletas del maletero del coche.

—El conductor empacará nuestras maletas, ¿verdad?.—Preguntó Albus mientras miraba de mí al conductor y luego de nuevo a mí.

—Sí, Albus. El conductor empacará nuestras maletas en el área de carga. No te estreses.—me reí.

—Lo siento, esta es la primera vez que estoy en un avión y en silencio, francamente... me estoy cagando.—se rió nerviosamente.

—Es la primera vez que lo hago, pero no me ves siendo un marica, ahora vamos.—Kehlani puso los ojos en blanco mientras tomaba la mano de Albus y lo arrastraba hacia el jet.

Con Elora todavía en mis brazos, avancé hacia el avión. Yo también estaba un poco nerviosa, había estado en un avión una vez pero fue hace mucho tiempo y fue con otras personas. Por alguna razón, estar en el avión con otras personas fue algo reconfortante. Saber que no eres la única que se está volviendo loco es una forma de afrontarlo.

Finalmente salí del último escalón y subí al avión.

—Así que esto es ser rico.