BEHIND CLOSED DOORS 2 | DRACO MALFOY ✓

𝟑𝟔. 𝐕𝐀𝐍𝐈𝐋𝐋𝐀

Draco Malfoy.

Sonreí para mí mismo, sabiendo que Anna no duraría una semana como cree que lo haría. Iba a hacer esto completamente imposible para ella y voy a disfrutar cada segundo. No estaba seguro de cuánto duraría, pero he pasado por cosas peores.

Aproximadamente un año sin nada.

De todos modos, caminé hacia el lado opuesto de la habitación del hotel, buscando que Albus tuviera esta estúpida charla. No debería tener que hablar con él sobre cómo complacer a su novia, debería estar en su naturaleza, quiero decir que está relacionado con ese idiota engreído, Harry Potter quien no sabría cómo complacer a una chica ni aunque viera con 100x.

— Albus— Crucé mis brazos sobre mi pecho mientras veía a Albus ponerse una camiseta sobre su cabeza. Afortunadamente para mí, entré en el momento adecuado y él ya estaba vestido. Tropezó hacia atrás, escuchar mi voz debió de asustarlo.

Sonreí con satisfacción ante eso.

— ¿Señor Malfoy?— Dijo, un poco inseguro de si debería llamarme así. En realidad, nunca había hablado con Albus a solas y me di cuenta de que iba a hacer que esto fuera lo más incómodo posible.

— Estás saliendo con la mejor amiga de mi esposa, estoy seguro de que puedes llamarme Draco— dije mientras entraba a la habitación y me acomodaba en una silla en la esquina. Se quedó parado incómodo, sin saber cómo hacer para "Sentarse". Puse los ojos en blanco.

— Oh... um, bien— se sentó en el borde de la cama, cruzando torpemente las manos en su regazo mientras jugueteaba para ponerse cómodo.

— Bien— suspiré, esta iba a ser una conversación larga— Voy a ir directo al grano porque tengo mejores cosas que hacer hoy— Me incliné hacia adelante, colocando mis brazos sobre mis rodillas.

—¿Qué-

—Eres una mierda en la cama y necesitas intensificar tu juego,— solté sin ninguna preocupación en el mundo. Vi que sus ojos se ensanchaban y se volvían mucho más incómodos, pero era necesario decir— Tú eres también... eh... Vainilla, así es como lo dicen los muggles.

— ¿Vainilla?— Preguntó Albus, su voz pequeña e incómoda. Desde donde estaba sentado, parecía un marica y me sentí mal por Kehlani.

— Sip. Tomarse de la mano, besar los labios, posición de misionero, vainilla— dije mientras casi se ahogaba en su propia saliva, sé que estaba usando palabras explícitas y no lo estaba ayudando a hacerlo, pero probablemente así fue como terminó en este lío.

El consejo de Potter sobre cómo animar a su hijo a tener relaciones sexuales ha empeorado las cosas.

— Oh, joder. ¿Estás hablando de sexo? ¿Por qué?- En realidad no quiero saber solo continúa,— dijo mientras fruncía el ceño.

— ¿De qué carajo pensaste que estaba hablando? ¿Que Kehlani odia cómo hablas dormido? ¡Por supuesto que estoy hablando de sexo!— Levanté mis dedos para pellizcar suavemente el puente de mi nariz mientras cerraba los ojos y trataba de contener mi frustración.

— ¿Has oído hablar del juego con cuchillos?— Le pregunté mientras me miraba completamente desorientado— Bien, está bien. ¿Has visto lo que hay en la nalga de Anna?

— No, particularmente no le miro el culo a mis mejores amigas.

— Bien. Esa fue la respuesta correcta— Asentí mientras Albus arqueaba una ceja en confusión. Para ser honesto, no estaba muy seguro de adónde iba con eso, pero no obstante, continuaré.

— Ella tiene mis iniciales en su trasero— dije simplemente mientras Albus miraba a su alrededor con torpeza.

— ¿Como... como un tatuaje?— Preguntó mientras soltaba una risa entrecortada y me recostaba en la silla.

— No, Albus. No como un tatuaje. Usé una navaja de bolsillo para tallar su piel durante el sexo— dije mientras miraba la expresión de miedo total en su rostro. Si no estuviera tan frustrado en este momento, sería casi divertido.

— ¿¡Ella... hiciste qué !? ¿Cómo no duele eso? ¿Por qué te dejó hacer eso? ¿Cuándo hiciste eso?

— ¡Albus! Cálmate. Creo que eso es lo más Vainilla que hemos hecho en realidad— dije mientras me sentaba en mis pensamientos por un momento antes de mirar a Albus que tenía una pequeña sonrisa en su rostro— ¿Qué?

— ¿Entonces me estás diciendo que quieres que yo mismo grabe mis iniciales en la piel de Kehlani?— Preguntó mientras me reía, levantando mi mano en el aire.

Joder, me rindo.

—Bien— me reí, este chico estaba más allá de mi ayuda. Me levanté de la silla y miré a Albus— Solo... habla con Kehlani. Pregúntale qué le gusta, qué no le gusta, habla sobre lo que te gusta y lo que no te gusta porque si no...  Ustedes dos no durarán mucho. El sexo es como una conversación, si no pueden sostener una, se aburrirán e irán a hablar con otra persona.

Albus asintió levemente, su piel estaba pálida. Creo que podría haberlo asustado un poco, pero eso es lo que debe suceder. Si escucho a Anna quejarse de la vida sexual de Kehlani una vez más... podría volverme loco y llevarme a Elora conmigo.

Caminé hacia la puerta, más que feliz de irme mientras miraba a Albus una vez más, viendo que todavía miraba hacia adelante, con suerte asimilando y pensando en lo que acababa de decir.

— Y por el amor de Merlín, Albus— dije mientras él lentamente me miraba parado en la puerta, listo para irse— Mira algo de pornografía.

Y eso fue todo. Salí por la puerta, queriendo borrar la dolorosa experiencia que acababa de tener. Si quisiera hablar con un adolescente despistado sobre sexo, me convertiría en profesor de educación sexual y echaría a Angelina de su lugar.

Pero ahora tenía que afrontar la dura realidad que es mi hijo. Siempre me pregunté qué había hecho mal allí, seguro que no estaba allí para él cada segundo y Astoria era quien realmente era el padre, pero no lo amaba menos.

Todavía recuerdo cuando era un niño, de unos 4 años. Astoria y yo lo habíamos enviado a una escuela previa a los magos y brujas, pensé que sería más fácil para los dos con nuestra vida ocupada, pero a él no le importaba mucho, le encantaba.

Era un chico tan dulce, sus profesores me decían que nunca le haría daño a una mosca y que se hizo amigo de una niña pequeña, ¿cómo se llamaba?... Emerlyn, no podía molestarme en recordar el apellido. Estuvieron unidos por la cadera hasta que ella se mudó, a Francia o alguna mierda por el estilo.

Mi punto es que nunca esperé cómo iba a resultar, nunca me di cuenta de cuándo y qué salió mal en él. ¿Fue algo que hice yo, algo que hizo Astoria o lo que significaba ser así?

Cuando Anna quedó embarazada, me asusté. No quería que Elora se volviera como él, me cansé de hacer todo lo posible para ser diferente para ella y es demasiado pronto para decir cómo resultará. Anna es una buena madre y no planea desaparecer cuando la niña tenga 17 años.

Creo que Scorpius simplemente no estaba bien, un interruptor en su cerebro estaba mal conectado y estoy seguro de que nunca sabré cuál.