Cap.3

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Edad: 10 años 

🔎Perdidos🔎

Sid estaba a mi costado en la clase de Literatura, en frente estaba Chloe y en la primera fila a la derecha del escritorio de la maestra se encontraba Lincoln.

Habían pasado dos años desde que el llego y las cosas se complicaron BASTANTE en mi vida. Resulto que Lincoln era un estudiante ejemplar en la escuela, se llevaba más de las mil maravillas con Bobby haciendo los deberes y haciendo proyectos, Cosa que antes era sorprendente porque a mi ni siquiera me hablaba, Con Carlitos fue distinto, Después del "Pequeño incidente" todo quedo en el olvido, Lincoln trataba a Carlitos como si fuera su hermana pequeña, es decir como trataba a su pequeña hermana Lily. Pero conmigo ni siquiera se atrevía a mirarme fijamente a los ojos, la última y primera vez que lo hizo fue cuándo empujo a Carlitos. Desde ese día y adelante me evitaba, me dirigía la palabra solo para cosas importante incluso evitaba estar en la misma habitación que yo. 

¿Qué le pasaba? ¿Acaso olía mal? ¿Era fea? ¿O no le agradaba? 

Era como vivir con un fantasma, sabía que estaba ahí pero no lo podía ver. Era un niño despreciable, nada comparado con su madre que fue la mejor niñera que tuve en años, salvo por el pequeño detalle que no me deja comer galletas después de las ocho. 

Sin embargo, desde la ultima aparición de la galletas frente a mi puerta cada vez que me enojaba cuándo no me dejaban comer, Cada noche unas galletas envueltas en una servilleta tocaban a la mitad de la noche. Comencé a creer esas historias que me contaba mi mamá cuándo era pequeña, Tal vez las hadas de las galletas existan. 

La maestra leía un aburrido poema. Puse cara de concentrada pero en realidad estaba pensando como convencer a mi mamá para que me dejase ir a la casa de Sid con Lalo esta tarde, Seguramente me diría "Lleva a Lincoln Contigo" antes me obligaba ir con Carlitos a todas partes, pero misteriosamente se le metía en su cabeza que el niño retrasado de cabello blanco podría ser mi amigo. ERROR, el jamás lo sería

Odiaba la idea de que el vaya a la misma escuela que yo, por alguna razón que estaba fuera de mis conocimientos mis padres le pagaban la educación a Lincoln, Lori y Lily. En navidad les daban regalos y les dejaban cenar en la misma mesa que a nosotros y eran libres de listas, reglas y alergias cosa que yo no.

Ronnie podrías decirme de a la clase que se trata el poema -salte en mi asiento y me aparte un mechón negro que caía cobre mi frente. Cuarenta pares de ojos voltearon a mirarme. Recordé que la abuela me había dicho que cuándo no sabía algo sonría y me echara el cabello hacia atrás con delicadeza.

GRAVE ERROR 

Cuándo intente sonreír me salió más como una mueca sarcástica y cuándo iba a echar mi cabello hacia atrás estos se enredaron en el 

Que idea más estúpida 

Escuche algunas risas, las cuales esperaba, pero la más fuerte era la de Cristina que se sentaba al lado de Lincoln, esta le susurró algo al oído y rio más fuerte, pero a él no le dio gracia 

Te estamos esperando Ronnie -Dijo la maestra avanzando hacía mi lugar con una mirada que ponían las personas cuándo hablaban con un enfermo mental. Eso me molesto 

Giré mi cabeza a Sid, tal vez ella me ayude, pero se encogió de hombros, Mire a Chloe y ella bajo la mirada, Ninguna de las dos presto atención.

Sentía ganas de llorar, la maestra y la idiota de Cristina me estaban avergonzando. 

¡Ronnie es una descerebrada! -grito Cristina desde la primera fila, todo el salón estallo en carcajadas menos mis amigas y Lincoln, que seguían tan serios como si estuvieranVi co en un funeral. 

Debería odiarte, pero no puedo (Ronnicoln)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora