-¡Hola a todos! Soy Wendy Torres. Junto a mis mejores amigas y amigos, hemos descubierto secretos asombrosos, todo a partir de lo que parecía un simple sueño. ¿Pero y si no era solo un sueño? ¿Y si era una ventana a nuestra vida pasada? Si quieres d...
Reina Beryl: Kunzite, necesitamos el Cristal Estrella con urgencia. Es imperativo arrebatárselo a Sailor Star-Ordenó, con un tono grave.
Kunzite: Así será, Reina Beryl-Respondió, con firmeza.
Reina Beryl: ¿Aún no has descubierto su verdadera identidad?-Preguntó, con una mirada severa.
Kunzite: No, pero estoy en ello. Muy pronto lo sabremos-Contestó, inclinando la cabeza en señal de disculpa.
Reina Beryl: ¿Por qué tarda tanto? Debes averiguarlo sin más demoras y despojarnos del Cristal Estrella. No podemos permitirnos más retrasos-Exigió, impaciente.
Kunzite: Entiendo perfectamente, Reina Beryl. Ya he tomado medidas para nuestra próxima acción-Informó, con seriedad.
Reina Beryl: ¿Ah, sí?-Inquirió, interesada.
Kunzite: He conseguido uno de sus cabellos durante nuestra última confrontación. Con esto, podré localizarla rápidamente y descubrir qué identidad está usando-Explicó, mostrando el cabello con una expresión determinada.
Reina Beryl: Asegúrate de tener éxito-Exigió, con firmeza.
Kunzite: Sí, lo haré-Confirmó, antes de desaparecer en una nube de oscuridad.
***
-Después de la reunión en el templo Hikawa, Taro se dirigió a la casa de Wendy, preocupado por su ausencia. Al llegar, saludó a María, la madre de Wendy, y se dirigió a la habitación de su amiga. Cuando llegó frente a la puerta, notó que estaba entreabierta y escuchó una melodía suave que emanaba de una caja de música. Decidió tocar la puerta antes de entrar:
Taro: Hola, Wen. ¿Puedo pasar?-Preguntó, al escuchar el permiso para entrar.
-Al abrir la puerta, encontró a Wendy sentada en el suelo, inmersa en la melodía de la caja de música. Al ver a Taro, se sorprendió y se levantó rápidamente:
Wendy: ¡Hola, Taro! ¿Qué te trae por aquí?-Preguntó, con una sonrisa algo forzada.
T
aro: Hola, pequeña. Vine a ver cómo estabas. Noté que no fuiste al templo Hikawa-Dijo, con una sonrisa cálida.
Wendy: Estoy bien, solo tenía algunas cosas que hacer y no pude ir-Respondió, bajando la mirada.
Taro: Sé que eso, pero no me refiero solo a eso-Aclaró, mientras le levantaba el mentón para mirarla a los ojos-Dime qué te atormenta, Wen. Sé que estás mintiendo. No eres la misma de antes-Dijo, con una expresión comprensiva.
Wendy: Lo siento, Taro...si no hubiera sido por mí, no te hubieras herido ni muerto...no sabes lo que sentí al verte atravesado por ese cristal...ese cristal que debería haberme herido a mí...fue horrible. Temí perderte para siempre-Confesó, mientras las lágrimas comenzaban a brotar de sus ojos.
Taro: Wen, cariño, no te atormentes más con eso. Ya pasó, estoy aquí contigo, y fue gracias a ti-La consoló, abrazándola suavemente.
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