— ¡Jiro, Jiro! ¡¿Que hago?! ¡Mí vida social y universitaria estaban en ese celular! ¡Mis PDF'S ilegales también estaban ahí! ¡Los necesito si quiero aprobar!
Jiro Kyoka se pregunto por centésima vez en su vida porque era la mejor amiga de alguien tan melodramático como Kaminari Denki.
Y una vez más, su mente no le dio otra respuesta que no fuera "lo quieres y ya".
La pequeña azabache de ojos ónix suspiro y palmeó la cabeza del rubio que lloriqueaba sobre su mesa, lamentando la pérdida de su celular —uno que tenía hacía unos tres años y realmente, guardaba todos los secretos del joven veinteañero— el cual estuvo buscando durante todo el bendito día. Dándose por vencido cuando fue su hora de ir a comer y ella le pidió un momento de descanso para disfrutar de su café.
Pero no podía disfrutar su amargo café con los lloriqueos de su amigo de fondo.
—Kaminari, cálmate. Termino mí café y vamos a la sección de objetos perdidos de tu edificio. Alguien debió dejarlo ahí —argumento la azabache —Deja de llorar.
— ¡¿Cómo podría no llorar cuando mí bebé está perdido, Jiro?! ¡Solo, con frío y sin batería! —exclamo el de ojos dorados — ¡Rogando por mí!
—Los celulares no ruegan, Kaminari —rodó los ojos la azabache —Y el tuyo en especial estaría feliz de tener un descanso.
— ¡Mujer de corazón frío! ¡Malvada!
Kyoka rodó los ojos otra vez y estaba por golpear a su amigo que estaba a un grito más de sacarla de quicio, cuando su propio celular sonó y les llamo la atención a ambos.
La azabache estaba confundida porque, por lo general, nadie le mandaba mensajes cuando estaba en la universidad. Su novia no quería molestará y sus padres tampoco, incluso el rubio solo le mandaba uno o dos mensajes durante toda la jornada únicamente para preguntarle o recordarle que comieran juntos.
— ¿Es Yaomomo? —pregunto el de ojos dorados, olvidando su tristeza y sonriendo con picardía.
Un leve rubor cubrió los pómulos de la femenina quien chasqueo la lengua y saco su celular de su chaqueta negra, viendo con confusión que quien la llamaba no era su novia.
La foto que Kaminari les había sacado —a costa de su voluntad, aunque debía confesar que era una de las que más le gustaban— se mostraba en su celular, indicando que quien llamaba era el rubio que tenía en frente.
O más bien, su celular era el que la estaba llamando.
Antes de siquiera decir algo, Jiro puso en alta voz la llamada y dejo su celular sobre la mesa dónde habían estado almorzando.
—Hola, ¿quien habla?
Hubo un breve sonido, como cuando alguien estaba caminando de un lado al otro y sumado a eso, se escuchaban un par de voces más que los dos amigos no supieron distinguir. Eso hasta que quien sea que estuviera llamando, llego a un lugar más silencioso y se escuchó el chasquido de una puerta siendo cerrada.
— ¿Hola? —repitió la de ojos ónix al no oír una respuesta del otro lado.
—Lo lamento, estaba pasando por un pasillo concurrido. Hola.
La voz era de un hombre, sonaba profunda y carente de emociones. A el rubio le sonaba algo familiar pero no podía identificar de dónde.
—Encontre este celular hoy a la mañana, luego de chocar con su dueño —siguió hablando la voz masculina desconocida —Quisiera poder devolverlo en persona y tener la oportunidad de hablar con él, si es posible.
ESTÁS LEYENDO
Clases de noviazgo [TodoKami]
FanfictionKaminari Denki es un joven universitario que disfruta de lo que es una vida "libre" y sin ningún compromiso. Tiene varias parejas casuales, sale con sus amigos y disfruta tocando la guitarra con su mejor amiga. ¿Cómo terminó siendo maestro de relaci...