Mutantes vs Manada (teen wolf)

Capitulo 26

Habían pasado varios días desde la batalla, del sargento se habían ocupado el sheriff y Peter, y a pesar de todas las veces que había preguntado qué había pasado con él los adultos no decían ni una sola palabra.

Resulta que Alex y Rachel eran más amigables de lo que parecían en un principio, les encantaba poder hablar con más gente que no fuesen sus instructores, que entendiesen por lo que habían pasado.

Por suerte compartían habitación, así no ocupaban mucho más espacio, solo quedaba una habitación libre, así que tenían que tener mucho cuidado con quien dejaban entrar a sus vidas, no es que no quieran acoger a más gente en problemas, es solo que una familia grande siempre tiene más problemas, y meter a chicos con poderes en una casa junto a hombres lobo puede crear conflictos explosivos.

Stiles ya les había puesto al corriente sobre la manada del pueblo, y que les verían en el instituto, seguramente preguntarán por ellos, gracias al sheriff y al dinero de Peter había conseguido meter a los novatos en el instituto.

Después de la batalla se quedaron unos días en casa para recuperarse y para poner al día a Alex y Rachel.

Estaban en la última semana antes de las vacaciones de navidad, Peter no había tenido que comprar otro coche, gracias a que arreglaron algunos de los que llevó el gobierno, y se quedaron con ellos.

Llegaban del instituto hablando y riendo:

-Stiles: La cara de Scott fue brutal, me encanta ver como el verdadero alfa se asusta cuando ve algo que no entiende.

-Rachel: Parece que su beta tiene más agallas que el.

-Alex: No te creas, cuando me vio convertir mis brazos en estacas de hielo, juro que lo vi mearse en los pantalones.

-Elizabeth: No entiendo cómo han sobrevivido tanto tiempo, esa tal Malia, en algún momento se los podría comer a todos, me cae bien.

-Stiles: Es mejor que no hables mucho de esa chica en casa.

-Erik: Vamos Stiles, nos reímos de toda la manada, que tiene de especial esa coyote.

-Stiles: Esa coyote es la hija de Peter, así que si no quieres que te arranque la cabeza no habléis de ella más de lo necesario.

-Carl: Es la hija de papá?

-Mónica: ¿Cómo puede ser eso? Quiero decir papá nunca habla de ella y no parece el típico hombre que tenga una hija y no se haga cargo de ella.

-Stiles: Por lo que se le escondieron a su hija, su hermana cuando era alfa le quitó los recuerdos, y Peter no se enteró hasta hace poco.

-Hayley: Oye hablando de tus padres, ¿sabes si tienen planeado casarse? Llevan mucho tiempo juntos, es hora de que den el paso.

-Stiles: El otro día hable con mi padre, lo han pensado, quieren una boda pequeña, aunque con tantos hijos eso no será posible.

-Alex: Tus padres son unas grandes personas, acoger a tanta gente sin apenas conocerlos, solo por ayudar, eso no lo hace nadie, y menos tratarlos como hijos.

-Stiles: Dentro de poco os trataran como sus propios hijos, solo tenéis que darles un poco de tiempo.

-Rachel: No creo que ese día llegue nunca, tu padre da miedo.

-Stiles: Qué quieres decir con eso?

-Alex: Tu padre es muy frío con nosotros. Creo que no nos quiere en tu casa.

-Erik: No es eso, Peter es así con los nuevos, teníais que haber visto cómo se puso cuando me presente como el novio de su hijo, me enseñó los dientes y me dijo que si le hacía algo a Stiles me arrancaría la garganta, y sus ojos rojos no ayudaban.

Todos se echaron a reír, imaginando a Erik muerto de miedo.

Sin haberlo imaginado había dos miembros nuevos en su nueva familia, se habían acoplado muy bien. Los días pasaban y no había problemas en casa, los chicos seguían yendo a la escuela, soportando las típicas miradas de la manada. Tienen claro que Scott no les volvería a molestar, y en más de una ocasión les advirtieron sobre cosas que habían aparecido, como había aclarado en su trato.

Tanto hombres lobo como mutantes habían conseguido la paz y la familia con la que tanto habían soñado, la familia era lo más importante, y esta familia era una de las más fuertes.

Los entrenamientos siguieron, para compenetrarse con los novatos en la batalla, pero más que nada lo hacían por diversión y para liberar estrés.

Sus problemas por fin habían terminado, pero sus aventuras seguirían por un largo tiempo, siempre como familia.

FIN