𝐻𝑒𝑎𝑙𝑖𝑛𝑔 𝑦𝑜𝑢𝑟 𝑠𝑜𝑢𝑙 (𝑤𝑎𝑛𝑔𝑥𝑖𝑎𝑛)

𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 28

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Días después

Había pasado casi una semana y no había rastro de Wei Ying, en este momento estaban en uno de los pueblos cerca de Yummeng, era una noche fría.

Un hombre de túnicas blancas se encontraba sobre un tejado, sus cabellos moviéndose al compás del viento, en su espalda se encontraba un Guqin y en su cintura una espada.

—Wei Ying-murmuró al viento.

Y saltó para seguir con su búsqueda.

Mientras todos se encontraban en búsqueda de Wei Ying, cuatro pequeñas figuras se escabullían lejos de la posada y se adentraban al bosque.

—Papá nos matará si se entera de esto-hablo una voz.

—Tiene razón, el líder Jiang nos matará, mejor volvamos-hablo un chico de túnicas verdes.

—¡Shhh!-los calló el de túnicas amarillas.

—Joven amante, sabes que papá realmente nos matará-dijo.

—¡No me digas así!.

—Chicos por favor-dijo el mayor de túnicas blancas y luego se detuvo-no tienen que venir conmigo, lo buscaré yo, pueden volver.

—¿Estas loco?, ¡no te dejaremos solo!-dijo el de túnicas amarillas.

—Es cierto A-Yuan, o vamos los cuatro, o no irá nadie-hablo el otro chico de túnicas blancas.

—Cierto, estamos en esto juntos-dijo el de túnicas verdes-Ademas, también estamos preocupados por el Mayor Wei-los otros dos asintieron en acuerdo.

Yuan suspiró y luego sonrió.

—Bien, gracias por acompañarme-Yuan miró a sus amigos con una sonrisa.

—Ahora, es hora de entrar al bosque-dijo Jin Ling y camino seguido de los otros tres.

Los cuatros niños se adentraron al espeso bosque, habían escuchado de sus mayores que lo más probable es que Wei Ying se mezclara por la oscuridad de la noche para pasar desapercibido.

—Por cierto, ¿trajeron los talismanes?-pregunto Lan Yuan.

—Si, los tiene Zizhen-dijo Jin Ling.

—¿Yo?, no, los tiene Yi-dijo.

—¿Quien en yo?, ¿que no los tiene la joven amante?-pregunto.

—No, no los tengo, le dije a Zizhen que los trajera-Jin Ling miró al de túnicas verdes.

—Yo pensé que A-Yi los tomó-dijo ZiZhen mirando al chico.

—No, yo pensé que los tenía Ling-dijo.

Lan Yuan se detuvo y con la mejor sonrisa que pudo formar, se volteó y miró a sus amigos.

—¿Alguno de vosotros, tiene los talismanes?-pregunto, los chicos tragaron en seco.

—No-respondieron al unísono.

Bien estaban jodidos si aparecía un fantasma o algo parecido.

—Ay por todos los cielos-murmuró Yuan mientras se masajeaba el puente de la nariz, en la noche es cuando los fantasma, monstruos y cadáveres tomaban más poder y salían.

—Pero no ha aparecido ningún fantasma hasta ahora, así qué tal vez tengamos suerte de no encontrar ninguno, ¿no?-dijo Jin Ling, y en el momento en el que lo dijo, todos sintieron un viento frió en su espalda seguido de un crujido.