Imperio de sangre 18+ [TERMINADA]

A través de sus ojos

Donnovan/Dominick

Estaba en el pequeño porche de la casa de empleados fumando un cigarrillo, arrecostado a una de las paredes del mismo, mientras veía a la nada.

Estaba muy oscuro lo que anunciaba que pronto amanecerá.

Había sido una noche agitada, debía estar agotado y lo estaba, pero no tenía intenciones ni sensación de querer pegar el ojo en lo que quedaba de madrugada, por lo que preferí gastar mi tiempo respirando aire fresco,mientras acomodaba mis pensamientos.

Sabía que algo había pasado en mi ausencia, cuando volví a ver a Alma está noche no era la misma mujer que deje en su mansión luego de haber sido interrumpidos nuevamente en el hotel.

No era que me interesaba su bienestar, debo aclarar, pero sabía que algo no estaba bien con ella lo cual me intrigaban.

Se había puesto una máscara impecable, pero llevaba el tiempo suficiente estudiándola para conocer que sus ojos era lo único que no podía controlar.

Esta noche se veía como la dueña de cualquier sueño perverso que un hombre en su sano juicio pudiera desear, se veía imponente, seductora y rota.

Si sabías mirar bien a través de ese par de ojos verdes, podías saber que era su punto débil y por eso sabía que había algo había cambiado, fuera de su máscara de indiferencia sus ojos reflejaban algo nuevo, estaban vacíos de emoción alguna.

Me intrigaban tal hecho pero no podía deducir cual era la causa, en especial cuando se atrevió a mentirme en la cara desvíando su mirada de la mía.

Lo que sea que sucedió debió ser grave ya que también me lo oculto a mi.

No era que el hecho de ser amantes, me había vuelto completamente su confidente y que me lo contaba todo, pero solía dejar las apariencias frente a mi, aún sin demostrar su vulnerabilidad mayor, claramente.

Todo el trayecto hacia dichosa fiesta me quebré la cabeza pensando en lo que pudo haber sido, que había hecho que levantara otra coraza para proteger su debilidad.

Porque era tan débil que eso la hacia tan fuerte.

A la vez que me dejaba de vuelta a nivel 0 para poder conseguir su confianza completamente, para así poder destruirla  con su mayor vulnerabilidad.

No tenía nada que pudiera servir de justificación, ante su reacción, o eso pensaba, hasta que vi el hematoma que ella queria ocultar bajo las espesas pulseras.

Él la había vuelto a golpear, rompiéndola aún más, aunque ella no lo externara.

Pero su falta de emoción hablaba por sí sola.

Una sensación extraña de furia y rabia me recorrió, con una terribles ganas de matar al poco hombre que era Luigi, aunque deseaba que la vida hiciera un poco de justicia y para estos momentos ya estuviera muerto.

Pero si la vida se volviera justa la mayoría del planeta lo estaría, por lo que las ganas de acabar yo mismo crecieron más ante la remota posibilidad de que muriera en el tiroteo.

Odiaba a todos los D'Angelo estaba en mi sangre, pero destestaba a ese cobarde.

Justifique mi rabia por lo poco hombre que era y cobarde a la tener que golpear a las mujeres al sentirse lo que realmente era, un ser inferior.

No era que yo fuera el mejor ejemplo a seguir, ni menos, pero estaba seguro de que no podía caer tan bajo de golpear a una mujer al sentirme menos.

Cosa que no era fácil que sucediera.

Pero no por ello debía descargar mi falta de hombría haciendo uso de mi fuerza física, con alguien que se lo mereciera o no.