Imperio de sangre 18+ [TERMINADA]

El anuncio mortal

Alma:

Luego de la pelea en la que había salido, solo gracias a la intervención de Elodie y Donnovan al lugar.

De lo contrario alguno de los dos habría salido en una bolsa negra.

Elodie me llevo hasta el otro extremo de la mansión, que por suerte era lo suficientemente grande para poder tener una distancia considerable sin salir de ella, y durante todo ese trayecto comenzó a interrogarme a más no poder.

Sabía que estaba preocupada por mí y mi estado el cual no era el mejor en especial porque sentía un ardor terrible en la mejilla izquierda además que cada sirviente con que nos cruzábamos me miraba como si acabara de salir de una película de terror, lo que no indicaba nada bueno de mi estado.

Pero pese al dolor que sentía en mi cara lo que más me preocupaba era él estado del bebé, había bloqueado toda oportunidad de que Luigi golpeara alguna parte que pudiera hacerle daño pero aún así tenía miedo.

En cuanto llegamos a una habitación lo suficientemente alejada, Elodie llamo a alguien de servidumbre mientras yo solo quería arrecostarme un momento.

Luego de entrar no me quedo otra que contarle la razón por la que Luigi me había golpeado está vez.

Apesar de que seguía muy dolida que hubiera ocultado que él me agredía, no podía hacerla cargar con ese peso, que ni no había podido arreglar.

En cuanto le dije la noticia del bebé, pensé que también me lo recriminaria a una falta de confianza en nuestra "amistad", pero en un principio se mostró algo pasmada, pero por suerte no me pregunto nada sobre el progenitor.

Porque no estaba en mi mejor estado para explicarle toda la travesía.

Luego de desinfectar mis heridas, no pude evitar recordar la vez que Donnovan estaba en su lugar, curando mis heridas en un simple cuarto de baño, la última vez que había dejado que Luigi me ..ya saben.

  Elodie se marchó luego prometerme mantenerme al tanto de lo que pasará, salió de la habitación después de entregarme una bolsa de hielo

Así que el resto del día luego de darme una ducha me mantuve en la cama acariciando mi vientre con una pequeña forma de vida.

Pensando en lo que tenía que estar pasando uno de los podría ser su potencial padre en estos momentos.

Aún recordaba la mirada glacial que tenía cuando arremetió en la habitación, vi como  la  ira pura se reflejaba en sus  ojos y como algo de preocupación cruzó en ellos en cuanto me miró.

Sabía que Luigi no era un digno rival para Donnovan, pero aún así temia por él, porque Luigi era un cobarde y por ende un tramposo.

Y él  que se enfrentará ante él solo le dejaba  dos alternativas: Que Luigi muriera o aceptará las consecuencias de haberse metido con él y era algo que me inquietaba a tal punto que no logré conciliar el sueño en toda la noche pensando en si el seguía en el mundo de los vivos o estaba a la espera de una injusta sentencia a muerte.

Solo por defenderme.

+-------+

Al día siguiente del siguiente día, luego de no haber dormido absolutamente nada por dos días seguidos desde los sucedido en la biblioteca.

Pasé compadeciendome estando en cama sin algún rastro de Elodie, hasta que decidí darme una ducha porque sentía la cara jodidamente adolorida.

Pero todavía tenía el sabor de que esta vez había podido defenderme y apostaba que la herida que le había causado con la botella a ese idiota iba a llegar a ser permanente.