-Aaaaaaaahg – grite con todas mis fuerzas, me sentía cansada, quería que todo esto terminará de una vez para así poder dormir toda la semana si no era mucho pedir
-Vamos Rose respira – decía mi madre a mi lado – el doctor ya viene en camino
-Ya no aguanto, es muy fuerte– dije como pude, apenas podía controlar mi respiración a causa del dolor
-Vamos Roza solo un poco más – decía Dimitri tomando mi mano
-Es fácil decirlo camarada, tú no eres el que siente esto – dije con dificultad, las contracciones eran más seguidas y dolorosas
-Lo sé – contesto con pesar, podía ver en su mirada que el sufría por no poder hacer nada, el teléfono de mi mama sonó distrayéndome un poco, mi madre seguía junto a mi sin hacer caso a su teléfono
-Contesta – le dije – puede ser algo importante
-Llamaran a alguien más, tu eres lo más importante ahora – dijo con una sonrisa reconfortante, Mikhail entro de golpe al cuarto asustándonos a todos
-Ataque Strigoi – dijo alarmado – debemos de sacarla de aquí, están rodeando el palacio
-Como ha sido posible que eso ocurriera – dijo Dimitri alarmado, poniéndose de pie con estaca en mano
-No lo sé, solo sé que estamos en peligro, Hans llamo para decir que el palacio no es seguro, ellos están haciendo lo posible por entrar pero los Strigoi nos han rodeado – Mikhail se veía demasiado angustiado – el medico no logro entrar, no llegara a tiempo – dijo esto último viendo hacia mi
-¿Cuántos de los nuestros están aquí? – pregunto mi madre alarmada también
-Están los seis guardianes de Lissa mas los dos guardianes de Rose, estamos Eddie, Viktoria, ustedes dos y yo, tenemos dos Moroi de fuego aparte de Cristian, también están Abe, Jill y Sídney, aunque según Hans son demasiados casi tantos como la última vez, Adrián y Sonya pueden ayudar con sus barreras invisibles pero si traen usuarios de Espíritu como la última vez que atacaron, tendremos que enfrentarlos
-No podemos sacar a Rose de aquí, a nadie en realidad – dijo mi madre – si estamos rodeados como dice Hans no hay forma de salir, debemos de estar preparados no han de tardar en llegar hasta aquí
-Que vamos a hacer – dije muy alarmada – sin el doctor mi hijo no podrá nacer y no creo poder aguantar mas
-Y no lo harás, tendrás a tu bebe y yo te voy a ayudar – mi madre tenía un mirada decisiva que me daba a entender que hablaba muy en serio – traigan a la Reina, estará más segura aquí adentro además ella me ayudara con Rose, también traigan a la princesa y un Moroi de fuego, los demás permanezcan afuera para evitar que entren a la habitación - Mikhail asintió y salió para notificar a los demás
-Estarás bien Roza, nadie podrá acercarse a ti y a nuestro hijo, lo prometo – Dimitri me dio un beso muy intenso en los labios, nos sujetamos muy fuerte las manos hasta que él se levantó para irse tras Mikhail
-Aquí estamos – dijo Lissa entrando en seguida – todo estará bien Rose - yo asentí aunque no estaba muy convencida, me sentía muy vulnerable e inútil estando en esta situación, además de que el dolor me nublaba la mente, no lograba pensar con claridad
-De acuerdo hija vamos a empezar – dijo mi madre con un poco de nerviosismo
-¿Has hecho esto alguna vez? – sabia la respuesta aun así decidí hacer la pregunta
-No, pero siempre hay una primera vez – no me vio a la cara lo que me confirmaba su ansiedad – tendrás que sentarte un poco Rose y abrirás tus piernas – asentí e hice lo que me pidió – estas dilatada así que es mejor que empieces a pujar – no me lo dijo dos veces así que empecé a pujar, por más que quise no pude evitar gritar, esto dolía mucho más que las contracciones
-No, no puedo – dije desesperada – no quiero – pensar que mi bebe estará fuera dentro de poco y rodeado de Strigoi hizo que una angustia que jamás había sentido se apoderara de mi
-Vamos Rose debes hacerlo – decía Jill a mi lado
-Tengo miedo, mucho miedo – para este punto mis lágrimas eran incontrolables
-Vamos cariño, no pasara nada, se lo que sientes créeme te entiendo, tu angustia por mantener a tu hijo a salvo es indescriptible pero negándote a pujar solo lo lastimas, es hora de que nazca y tu tienes que ayudarlo, yo sentí el mismo miedo cuando tu naciste, odiaba la idea de apartarme de ti pero en ese entonces yo pensaba que no tenía otra opción, que eso es lo que debía de hacer por nuestro bien pero tu, tu eres diferente, haz logrado cosas increíbles, nos haz dado oportunidades y haz cambiado nuestra forma de ver la sociedad en la que vivimos, no sabes lo mucho que me arrepiento de todos estos años que perdí lejos de ti, serás una gran madre mi amor ya lo verás y te prometo que esta vez estaré a tu lado
-Gracias mamá, gracias por estar hoy conmigo – cerré mis ojos, me concentre, llene mis pulmones de aire y empecé a pujar
-Vas muy bien Rose, vas muy bien – decía mi madre – a la de tres pujas de nuevo – solo moví la cabeza y empecé de nuevo – puedo ver la cabecita, solo un poco mas Rose – no se cuantas veces mas tuve que hacerlo, hasta que sentí que algo empezaba a salir de entre mis piernas, sentía dolor y mucho, pero poco a poco sentía también un alivio eso hasta que escuche un llanto,
un llanto que me hizo olvidarme de todo y de todos lo único que deseaba en ese momento era tener entre mis brazos al causante de ese sonido, quería abrazarlo, protegerlo y darle todo mi amor
-Es un niño – dijo mi madre con una enorme sonrisa y sus ojos llenos de lagrimas, es hermoso e igual de escandaloso que tu – dijo riéndose, lo que sentí al tenerlo entre mis brazos es indescriptible
-Llamare a Dimitri – dijo Jill con emoción, todos los que estaban en la habitación me felicitaron pero aunque estaban felices la tensión se empezaba a notar, mi felicidad y emoción me habían hecho olvidar por un momento el problema que estábamos pasando, la puerta se abrió de golpe y entro Dimitri corriendo con Jill y Cristian pisándole los talones
-Debemos sacarte de aquí inmediatamente – se quedo inmóvil por un segundo al ver por primera vez a nuestro hijo, sus ojos se veían llenos de emoción y terror a la vez sabia lo que estaba pensando esa sensación yo la había sentido durante el parto, nuestros ojos se encontraron y en seguida supimos lo que debíamos de hacer o al menos lo que yo pensaba hacer aunque Dimitri no estaría contento con mi decisión la aceptaría sin mas – creo que la necesitaras – extendió su mano con una estaca en ella, yo la tome sin titubear
-Ella necesita descansar, Rose no estas en condiciones de pelear – dijo Lissa alarmada, me levante de la cama con mi hijo en brazos y se lo entregue
-Si algo nos pasa prométeme que lo vas a cuidar – la mire a los ojos con determinación y ella los abrió tanto por la sorpresa, sus ojos se llenaron de lagrimas
-Como si fuera mi propio hijo – contesto llorando – bese a mi hijo por ultima vez y me gire para ver a Dimitri, el también se acerco a nuestro bebe y lo beso, incluso vi un intento por querer cargarlo pero no lo hizo, sabia que si lo hacia no querría dejarlo
-Mama – me gire a verla y ella me abrazo con tanta fuerza
-Siempre estaré a su lado te lo prometo, pero tu promete que volverás, ambos volverán – dijo tomando a Dimitri de la mano también
-Lo prometo – le conteste, sabia que no debía de hacer promesas de este tipo pero su mirada no me dio opción, nos abrazo por ultima vez y miro a Dimitri esta vez con su mascara de guardián y dijo
-Dinos que hacer
![](https://img.wattpad.com/cover/224622785-288-k189002.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Promesa de muerte
FanfictionDespués de que Rose y Lissa pierden su vinculo y la princesa es coronada a Reina, Rose empieza a experimentar sueños muy extraños. Ahora no solo deberán enfrentar strigoi sino que aparecerán nuevos y viejos enemigos para complicar las cosas aun ma...