Capítulo 22

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 -¿No te cansa que los problemas solo le lleguen a las personas buenas?-Preguntó Johnatan mirando a los ojos de su amiga rubia-Todos me dicen que todo estará bien pero eso no lo tengo asegurado, Camelia no aparece por días y ya me estoy volviendo loco porque me dejó a la mañana siguiente, se fue sin avisar y no entiendo cuál es la razón de huir porque estábamos tan bien y ella simplemente desapareció.

 -Ella no quiere estar para ti-Informó Gisela-Claramente es una pésima amiga.

 -No, ella no es así, siempre estuve a su disposición y ella siempre estuvo en mis peores momentos, siempre fuimos ella y yo contra el mundo, nada podía detenernos y ahora que todo se está yendo a la mierda, yo me quedaré a esperar su llamada.

 -Es inútil, Johnny, yo estoy para ti.

 El chico abrazó a Gisela agradeciéndole la compañía, estaban sentados en la terraza del muchacho con abrigos muy pesados ya que era el comienzo del invierno, el sonido de la ciudad llegaba a sus oídos, Johnatan había intentado dejar el cigarrillo por esos días que había pasado encerrado en su departamento, le habían habilitado un permiso para salir a hacer compras o para ver a su abogado, la chica estaba tiritando de frío así que el pelirrojo simplemente rodeó sus hombros con un brazo dándole refugio del viento gélido.

 Él se despidió de Gisela llevándola a la entrada del edificio, cuando estuvo a solas porque lo necesitaba se sentó en la mesada a comer su desayuno que era un simple plato de cereales con leche, él siempre recibía todos los días la visita de su hermano mayor pero ese día había alguien más con el mayor.

 -¿Alguna buena noticia?-Preguntó Johnatan tomando su almuerzo-Estoy cansado de estar encerrado-Agregó el menor-Quiero ir a ver a mis amigos o hacer esa estúpida canción para Iggy, así mi mente se ocupa en algo, necesito recreación, parezco un maldito pez dorado encerrado en una pecera y estoy cansado de nadar hasta chocarme con los vidrios, puedo usar el permiso que me dieron y no sé...¿Visitar a Susan?

 -La función de ese permiso es solo para hacer compras y visitar a papá-Dijo James con seriedad-Ya sé que no quieres ver a la persona que está afuera esperando y lo siento...

 -Johnatan-Murmuró la mujer observando el buzo rojo de su hijo.

 -¿Mamá?

 -Lo siento tanto, tuve que haberte hablado en algún momento sobre la verdad pero solo vine para apoyarte en este desliz que has tenido-Dijo Adeline, la madre de Johnatan vestida formalmente.

 -No necesito tu ayuda, Koby ya se está haciendo cargo-Expresó Johnatan con las manos en sus bolsillos.

 -Solo quiero tu abrazo de vuelta, siempre te he amado.

 -Madre, así como tú me desterraste sin perdón yo haré lo mismo y sé que esperabas el niño alegre que te recibiera en sus brazos pero tú...me mentiste por años, nunca me apoyaste con mis sueños y para colmo tienes la cara para presentarte en el único lugar que considero mi hogar.

 Adeline no pudo aguantar las lágrimas y a pesar de que Johnatan sintió algo de lástima por ella, no movió ni un dedo y la señora Harris se despidió de James, cruzó la puerta lentamente y desapareció de la vista de sus hijos.

 -¿Por qué la trajiste?-Preguntó Johnatan con el ceño fruncido.

 -Yo solo quería arreglar a la familia para hacerte feliz, no me ataques-Dijo James encogiéndose en su lugar.

 -Tuviste buenas intenciones James, pero mi familia se rompió hace mucho tiempo y no puede ser arreglada, yo solo te tengo a ti, a Emily, el tío Tansel, a mis amigos y a Cam-Empezó Johnatan con su voz temblando al mencionar el último nombre.

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