Su hermano se había quedado en el departamento mientras que Johnatan y Camelia, ya estaban en la universidad, la castaña se había separado de su amigo para buscar unas cosas en el departamento mientras que el chico iba al trabajo y luego se encontraron en la cafetería para ir juntos a clases, lo único que pasaba en la mente de Johnatan era cuánto tiempo se quedaría el pelirrojo de visita, qué sucedía con James rascándose de los nervios porque sus hermanos andaban ocultando algo, estaba desesperado por saber pero él era conocido por su impaciencia y el odio que sentía cuando le ocultaban cosas.
El muchacho estaba estudiando en su clase de lenguaje musical, observaba de reojo a Camelia que se la veía un poco más brillante por la cantidad de horas que durmió, solo quería hablar con ella para poder entender la pelea que tuvo con su compañera de piso, tuvo que ser algo realmente grave como para no querer dormir en su propio departamento, la castaña le regaló una sonrisa somnolienta al darse cuenta que él la estaba observando, él siguió escribiendo notas en su cuaderno; Johnatan era tan despreocupado a veces, pero cuando veía que sus seres queridos estaban sufriendo se convertía en una persona diferente.
Cuando el pelirrojo escuchó el timbre se levantó junto con Camelia, ambos estaban por irse a un lugar más privado para hablar pero el profesor detuvo al muchacho y le pidió que se quedara para hablar con él, Johnatan le dijo a la castaña que se adelantara que luego la alcanzaría, Johnatan se sentó frente al escritorio mientras que el profesor acomodaba unos papeles, el muchacho se preguntaba de qué quería hablar, tanto que ya estaba perdiendo la paciencia, el hombre de cabello negro y ojos celestes aclaró su garganta.
-Te quería hablar de tu presentación solista-Dijo el profesor directamente.
-¿Qué hay con mi presentación solista?-Preguntó Johnatan en medio de una risa sin ganas.
-Te estamos pidiendo que toques una pieza desde el año pasado pero tú siempre te rehúsas.
-No...tengo tiempo-Dijo el chico algo inseguro.
-Este año nos gustaría que lo pienses bien antes de decir que no, realmente eres muy talentoso-Dijo el profesor bebiendo de una taza de café en su escritorio.
-Lo tendré en cuenta, profesor.
Johnatan recogió su mochila, salió del salón encontrándose con la joven y él estático porque se sorprendió al ver que no se adelantó; en cambio, se quedó esperándolo pero ambos caminaron por los pasillos hasta encontrarse con un aula en la que estaba llena de instrumentos, allí se encerraron por un tiempo, Johnatan estaba esperando a que su amiga hablara pero ella parecía dudosa, como si las palabras quisieran salir de su garganta pero su mente las detenía y las encerraba en su boca con un candado invisible para que no dijera nada, ella quería decirlo pero lo único que había en su rostro eran lágrimas y el pelirrojo no fue lo suficientemente rápido, la chica ya había salido por la puerta dejándolo solo, con la compañía de los instrumentos.
Otro día en la que la ausencia de Camelia se hacía presente durante el resto del día, él ya se encontraba en su horario nocturno en la cafetería con su disfraz de helado, estaba apoyado en el vidrio pero observando a una muchacha que pasó caminando por la vereda de en frente, mientras que su amiga Lucy le hacía compañía.
-Tuviste que haberla visto, ni una palabra porque solo lágrimas-Dijo Johnatan encendiendo un cigarrillo-Me duele que esté pasando por un mal momento y yo no puedo ayudarla.
-Tal vez necesita su tiempo a solas-Murmuró Lucy observando al pelirrojo que estaba conteniendo una sonrisa.
-Nuestra amistad no funciona así, si ella está mal yo debo ayudarla y si yo estoy mal, ella debe ayudarme, no existe el tiempo a solas.
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Hundimiento
Fiksi RemajaJohnatan Harris siempre se mostró como el chico despreocupado, divertido, siempre positivo pero eso solo es la superficie, en un largo viaje para encontrar autoestima y superar los obstáculos que le imponen las voces en su cabeza Johnatan trata de a...