Cuando un Dios nace, un propósito se le asigna. Son parte de sus genes, algún Dios del más allá le ha dado un don especifico al momento de nacer y su deber es hacerse cargo de esos poderes magníficos. Sigyn como la Diosa de la lealtad y Loki como el...
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« Sigyn »
Se llevó acabo el funeral de Frigga. Todos tenían la mirada triste pero seria, yo estaba aguantando con dificultad mis lágrimas. Unas cuantas se me escaparon al ver su cuerpo en ese ataúd de oro ser movido por la corriente del agua, poco a poco se alejaba y las luces brillaban a su alrededor. Siempre agradeceré a la reina por su compresión, ayuda y dedicación conmigo. Solo me bastó un día aquí para que ella me hiciese sentir como en mi hogar. Sin su presencia y honorable apoyo, yo hubiese estado perdida. Por un acto de coraje fue arrebatada de nosotros, pero dio su vida para defendernos. Me sentía con un dolor inmenso en mi pecho, no me imaginaba cómo lo estarán llevando sus hijos; en especial Loki, quienes fueron más unidos. Miré hacia el príncipe Thor, éste estaba con el ceño fruncido por su perdida. Volteé hacia Loki, estaba de la misma forma pero no me convencía. Quizás estaba bajo una proyección donde pretendía llevar mejor la situación.
Cuando Frigga murió por nosotros, los guardias aparecieron, demasiado tarde. Éride escapó, no sin antes llorarle desgarradamente a Loki que lo lamentaba. Pero él no la perdonó, es más, jamás lo había visto tan molesto en mi vida. Hasta su voz se desfiguró del coraje, fue una escena muy impactante cómo le habló.
Cuando la ceremonia del funeral de la reina terminó, todos tomamos nuestros caminos. Lo que me sorprendió fue cuando padre de todo se acercó hacia nosotros.
—Esto es lo que pasa cuando se inicia una guerra —habló serio, pero sus ojos estaban fijamente en Loki— Y más con el dios de la venganza, ¿lo entiendes ahora que Frigga ya no está con nosotros?
—Esto no tiene nada que ver conmigo. Tú iniciaste todo, como siempre —masculló con odio.
—¿Y quién continuó con este altercado? —se apresuró en decir.
—No me culpes a mí, eres un asesino y un ladrón —espetó.
—Por el bien de Asgard, como el deber de un rey que protege a su mundo. ¿Y tú por qué asesinaste? —igual su voz sonó dura y resonante.
Loki solo se marchó a pasos duros, dejándonos atrás.
—Rey Odín, padre de todo, si me permite decirle; Loki ha estado yendo por el buen camino. Ha querido la protección de Asgard como todos nosotros —dije con mi postura firme, él solo me miraba— Espero pueda creerle, aunque sea por mí.
—Esté al tanto de todo, Sigyn —fue lo único que me dijo antes de irse.
Fui con Thor, donde le di un fuerte abrazo que correspondió con necesidad. Sabía que quería llorar, pero lo que él hacía era mantener la postura y seguir adelante. Sé que debe dar del ejemplo ante todos, pero nunca estaba mal mostrarse vulnerable y más con la perdida de un ser querido. No iba a hacerlo por obvias razones, ya que no debían mostrarse "débiles". Qué mal que sea así.