Kanpeki•Knb

Idiota

Aomine Daiki P.O.V

"¿Qué demonios pasa con ella?" Fue lo primero que pasó por mi mente cuando escuché sus audios ebria, por supuesto que la buscaría y trataría de ayudarla.Pero, ¿porqué, Shiroi? ¿Porqué nos seduces a todos de esta manera?
-Tú serás el desastre que me mantendrá satisfecha esta noche.-Maldita sea, ¿qué esperas que haga si me tienes acorralado en una habitación oscura a solas?
-...Estás ebria y drogada, Shiroi.
-...Aomine.-Mi apellido salió de su boca con recelo y mi piel se erizó.-No, Dai-kun.-La voz dulce que soltaba no coordinaba con sus acciones: ¿cómo alguien tan pequeña es capaz de aprisionarme en una cama?
-Shiroi, qu-...-Mi garganta se secó en cuanto ella se mostró desnuda ante mi, la palidez de su cuerpo se contradecía con sus oscuras intenciones, sus senos eran incomparables con los de las modelos de revistas, su estrecha cintura acompañada de su redonda cadera me volvía loco.Yo pecador confieso que aprisioné su cintura con mis manos, confieso que caí en la tentación de olerla y me di el lujo de poder verla encima mío, pero...No pude, con ella no.
-Shiroi, me encantaría ser tu desastre.Pero no aquí, y no ahora.
-¿Qué mierda dices?-Ella gruñó, molesta, mientras lágrimas caían de sus ojos avellanas.-Se supone que es lo que mejor hago.-Su voz se quebró y mi corazón se encogió, ella con rabia en su mirada desabrochó mi cinturón con la intención de trabajar su boca.
-Enana, no.-Mis manos acunaron su fino rostro empapado de lágrimas y ella lucía desorientada, los gritos fuera del cuarto se oían tan lejanos cuando estuve a centímetros de sus labios que por un momento, estuve cerca de perder la compostura.
-...¿Porqué, Daiki?-En cuanto salió su primer sollozo la puerta fue abierta de golpe y por poco todos la vieron desnuda, por reflejo la cubrí con las sábanas, sin embargo el puñetazo que recibí en el rostro estuvo a punto de hacerme perder el conocimiento.
-¿¡Qué carajos le hiciste, imbécil!?-La furia que emanaba Kagami me dejó perplejo.
-¡¿Y a ti qué te pasa, idiota!? ¿¡Crees que soy un estúpido violador!?-Un celular voló por el medio de nosotros y terminó quebrando el vidrio de una ventana, ambos miramos a Akashi confundidos.
-Cálmense, todos.-Esos ojos fríos nos dejaron tensos y alerta a todos, sin embargo nadie dijo nada.-Todos salgan de esta habitación, tomaremos turnos de cinco minutos para cuidar de ella hasta que quede dormida, empiezas tú, Daiki, y más te vale que sepas comportarte.
-Tch.-El chasquido de lengua de todos sonó al unísono, yo asenti y observé como los demás salían de mala gana.-Oi, ¿estás bien?-Shiroi observaba el techo en silencio y con las lágrimas rodando por su cara una tras otra.
-¿Porqué hiciste eso?-Su débil susurro me dejó intrigado.
-¿Hacer qué?
-...¿Porqué no te acostaste conmigo?-La miré con incredulidad.
-Porque estás ebria.-Una risa sarcástica resonó por la habitación.
-¿Y eso qué importa? Ellos tenían razón y la tendrán siempre, cualquiera que diga que soy interesante más allá del sexo, está mintiendo.-El llanto incrementó y yo quedé congelado, ¿quién te hizo esto, Shiroi?