¡Idiota!
Esa era la palabra correcta para describir como me acaba de quedar al ver a esa mujer imponer miedo a todos en este lugar. Tenia que aceptar que se veía tan sexy y jodidamente hermosa cuando mostraba lo fuerte que podía ser.
Como ella ordeno la fiesta se había acabado en ese mismísimo momento. Max, Gael y yo nos habíamos quedado a esperar a que todos se marcharan,
Había seguido intentando hablar con Samantha estos días, pero era inútil. Sus hombres nos habían alejado a como dé lugar, el único que podía verla y hablar con ella era Max para acordar las nuevas peleas que tendría próximamente.
Toda mi atención la había estado centrando en entrenar cada día y cada hora posible. Me reuní con los amigos que tenia abandonados, pero por alguna extraña razón todo me parecí aburrido a menos que tenga alcohol en la sangre.
En una de esas salidas todos mis amigos nos terminamos peleando atrás de un callejón con otro grupo, ¿¡por qué!? Pues porque medio la regalada gana y quería descargar mi maldita ira con alguien y muchas veces era una gran excusa para liberar lo idiota que tenía dentro.
- No puedes ir rompiendo caras por todo el lugar – me dice él dueño del bar.
- Claro que puedo – le respondo despreocupado.
- Te prohibiré la entrada si solo vienes a buscar pleitos – resopla y me pide que me vaya.
Me despido de todos, me pongo la cazadora y camino por la acera aun pensando en que podría estar haciendo Samantha en estos momentos, no la había visto durante días y no sabia si seguir intentando explicarle lo que paso, aunque ella me había dejado muy en claro que para ella no significaba nada.
Mi mente todas las noches repetía las veces que la tuve debajo y encima mío, las veces que disfrutaba de ella, pero aun más las palabras que nos decíamos mientras dejábamos que la pasión nos volverá locos.
Saco el celular al sentir la vibración en mi bolsillo, la pantalla me informa que es Max.
- Ya estoy en camino – tiemblo por el frio.
- Debes apurarte, no es bueno que estés a estas horas en la calle cuando tenemos peleas importantes próximamente – me dice al otro lado de la linea.
- Para no haber tenido padre – rio – te pareces mucho a uno.
- Idiota – cuelga.
Guardo el celular para que no se moje porque comienza a llover, al ver como de la otra acera un grupo de seis chicos que parecen verme y cruzan, sigo caminando, pero mi instinto me dice que a estas horas de la madrugada no creo ser el único loco que camina a estas horas a si por así.
La lluvia se hace más fuerte y esta demasiado oscuro para poder verlos a la cara, pero se acercan directamente a mi con aires de matones, una cosa era pelear en grupo y otra era pelear contra seis solo.
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DESEO LETAL
Teen FictionELLA ES EL PECADO HECHO MUJER Y EL PECADO DE ÉL DESEAR A QUIEN NO PUEDE TENER. Samantha es la dueña del corazón de uno de los Mafiosos más poderosos en todo el mundo, es una mujer creada por el mismísimo diablo porque toda ella representa el pecado...