si tan sólo él no existiera, tendría una vida más fácil para sobre llevar.
tal vez su corazón no tendría latidos tan fieros, ni sus noches tan firmes recuerdos sobre él.
tal vez, si no fuera como es, si su sonrisa no le hiciera las mejillas arder y...
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- ¿Puedes recordarme para que me trajiste aquí? - Jack seguía a Hastur de cerca, intentando no perderse entre tantas personas y atracciones, estar entre tantas personas...le causaba algo de ansiedad. Pero ese fin de semana, el más alto le había propuesto hacer algo para despejar la mente, resulta, que se refería al parque de diversiones que abrieron hace poco en la ciudad.
- para divertirnos un poco, claro - su sonrisa se le fue regalada, haciendo que el corazón de Jack diera un pequeño salto. Su sonrisa nunca dejaría de ser linda.
No le cuestionó nada después de allí, dejándose guiar.
Caminaron un rato uno al lado del otro, en silencio hasta encontrarse con algunos conocidos.
Hastur se había detenido a saludar a un chico de cabello gris, quién iba acompañado de el delegado de la clase, el jodido delegado del consejo estudiantil. La rata de los profesores. Vaya fin de semana asqueroso.
Ya se imaginaba lo que le diría en su cabeza "Hendrich, ¿Así que en vez de estar haciendo tus deberes estás aquí jugando?".
No quería discutir...no quería irse a los golpes con nadie, mucho menos con el de ojos azules.
Trato de no ser visto por él, porque, Dios.
Miro a su acompañante por momentos, tratando de comunicarle sin palabras que quería irse de allí, pero nada. Por suerte ninguno le prestaba atención gracias a Hastur. Algo disgustado, -y sin querer pasar mayor tiempo con personas que, alegaba él eran la burla de la escuela- se dispuso a caminar un poco alejado viendo los juegos y puestos de comida.
Había un establecimiento que le llamó la atención al momento o más bien, la música, que provenía de dentro. Miro a Hastur una vez más y pensó con detenimiento.
Aunque no lo pensó mucho enrealidad.
Entro al establecimiento sin más, dejando a Hastur charlar fuera. Solo sería un momento, ¿No?
Grave error, -porque se entretuvo bastante- la verdad.
Había juegos arcade antiguos, tales como Pacman... asteroids...y el que más llamó su atención, un juego de DDR, casi nuevo y en perfecto estado. Se emocionó internamente, sorprendido con el como lo habrían conseguido los de los juegos mecánicos.
Se acercó en silencio, unos chicos jugaban en el DDR, -con unos pasos terribles, si es que se le permitía opinar- inclusive uno se cayó y hasta maldijo a la pobre máquina, alegando que era un juego estúpido y deprimente. Jack en su lugar, -y con los brazos buen cruzados- solo se limitó a observar, viendo como varios se atrevían a intentar bailar y ganarle a las flechas, en vez de hacer lo que enrealidad se hacía con dicho juego.
