Buscando una salida.

El hermano.

¿Alguna vez se han quedado en shows luego de que pasara o les pasará algo que literal es como si te hubieran reiniciado?, Bueno así estaba yo..

Luca me estaba besando, ohhh por Dios, ¡DON PERFECTO ME ESTABA BESANDO!. Okay definitivamente este chico estaba loco, pero no podía quejarme sabía besar el señorito, ¿Quién lo diría?.

Luca se abrió paso en mi boca, con su lengua, el beso era tierno, pero jodeeeeeeeer,que bien se sentía, chupó despacio mi labio inferior, era una beso lento si apuros.

Pegó su cuerpo más al mío, bajo su mano a mi cintura, un escalofrío me recorrió desde mi espina dorsal, metió su mano dentro de mi camisa de uniforme y me acarició la espalda, empezó hacer círculos en mi piel desnuda, ahogue un gemido, no le haría saber que me gustaba lo que estaba haciendo, ¡NO SEÑOR CLARO QUE NO!.

Me siguió besando, tentando me con su lengua, note poco a poco cómo algo en su pantalón crecía, me sujete con fuerza de su camisa, y el me apretó aún más, pegando mi espalda a la pared, debía parar, pero joder no podía se sentía tan bien.

Luca intento bajar más su mano de mi cintura y me puse alerta, así que para terminar y que se llevará su merecido, cuando me iba a chupar el labio lo mordí, pero no fue suave, ohh claro que no, lo mordí con todo el cabreo que sentía, hasta que probé el saber de su sangre lo solte empujándolo lejos de mí.

–¡Mierda!, Me mordiste– me dijo con una mano en su labio conteniendo su sangre.

–Eso te pasa por ser un gilipollas, y un maldito atrevido, ¿Acaso no te enseñaron en tu escuelita de reglas que a una mujer no se le toca o besa sin su consentimiento?, O ¿acaso por qué eres el puñetero hijo de la subdirectora las reglas no te afectan?, Joder pero que boba soy, claro que no te afectan– le dije no porque me había gustado el beso significa que está bien, nadie tiene el derecho a besar o tocar a una mujer si está no se lo autoriza.

–Ari..yo...

–Cállate no quiero escucharte– lo corté no tenía ganas  de seguir escuchando – haznos un favor a los dos y déjame en paz–le espeté furiosa.

Salí de allí molesta, ¿!POR QUÉ NO ME DEJABA EN PAZ!?, Caminé hasta regresar al castillo, buscaría después a Jhos para decirle su cuatro verdades, Juli y Anni ya no estaban en las gradas, así que era posible que estuvieran ya en la habitación, caminé por los pasillos hacia el ala de las chicas, había muchos jóvenes pasando por allí así que no me fijé cuándo choque con un torso.

–Disculpa no me fijé por dónde iba– dijo una voz grave, levanté mi mirada y me encontré con un chico rubio, con unos preciosos ojos azules y una sonrisa encantadora– ¿Estás bien?.

–Estoy bien– retrocedí un poco para detallarlo mejor, era unos pocos años mayor que yo, alto, fornido,  llevaba un traje elegante negro, era guapo de eso no había duda– ahora quitarías por favor de mi caminó– contesté algo irritada.

Levantó sus manos en señal de Paz–Tranquila, vaya que ¡temperamento!– negó algo divertido, entrecerré mis ojos– como sea, lamento haber chocado contigo.

Puse los ojos en blanco y seguí mi caminó.

–Mi nombre es Julio.

Voltee– ¿Acaso te dije que me interesaba tú nombre?.

–Solo intentó ser amable, cuando estudiaba aquí los estudiantes no eran tan groseros.