JAMÁS PASARÁ

23. Gracias.

Abro la puerta de mi casa y todos dejan de hablar al verme llegar. Veo que llevan una cara de preocupación mayor de la que tenían cuando me fui. Y es obvio, ahora éramos dos las personas desaparecidas. Kilian se quedó afuera esperando a que yo les avise al resto que lo encontré.

- Hola. - digo cautelosamente.

- ¡Hija aquí estás! ¡A dónde te habías metido! - mi madre me agarra entre sus brazos fuertemente.

- ¿Cómo se te ocurre irte así hijita? - mi padre me regaña a la vez que revisa si estoy bien.

- No me fui sin tan... - mi madre no me deja terminar de hablar ya que comienza a analizarme la cara con sus ojos y sus manos.

- ¡Mamá estoy bien! - me libero de su agarre.

- Gemita que bueno que estás bien - María Elena se acerca. - la policía está a punto de llegar. Íbamos a ir a buscarlos a ambos.

- ¿La policía?

- Si cielo en 30 minutos se cumplirán las 24 horas de desaparecido de Kilian - su cara de angustia es tremenda - pensé que íbamos a encontrarlo pero no fue así y si la policía no lo hace tampoco, entonces el...

- Señora Aguilar - la detengo - se lo que está sintiendo y se que mis padres también lo sintieron hace un rato cuando yo me fui. Lo entiendo perfectamente porque yo también lo pasé por la desaparición de Kilian por eso hice lo que hice, no podía quedarme de brazos cruzados.

- ¿A qué te refieres Gemma?

- Hola mamá.

Kilian se encuentra detrás de su madre. María Elena se gira sin palabras y en su expresión se puede ver cómo la tristeza y la desesperación se convierten en felicidad y un gran alivio.

- ¡Kilian mi cielo¡ - María Elena abraza a su hijo fuertemente y lágrimas de alegría comienzan a brotar de sus ojos. - Hijito mío, por un momento pensé que no volvería a verte nunca más.

- Calma mamá aquí estoy, todo está bien. - Kilian acaricia la espalda de su madre en modo de consolación - perdón por haberte echo esto.

- No importa, lo importante es que regresaste y estás bien - se separa para mirarlo - ¿Pero como volviste?

Kilian le dedica una sonrisa y me señala sutilmente con la mirada. Ella se gira nuevamente hacia mi y en un mínimo instante la tengo apretujándome ahora a mi.

- Gracias, muchas gracias Gemmita, sabía que tú eras la indicada para traerlo de vuelta.

- No hay de que Señora Aguilar, lo haría mil veces más si es necesario.

- Oh no eso sí que no. - me suelta y mira de reojo a Kilian - basta de desapariciones.

Concuerdo con la señora.

Si yo también.

- Muchas gracias a ustedes también. - María Elena se dirige al resto de mi familia - no se que hubiera sido de mi en esta situación sin su ayuda. Prometo que los recompensare por haberme acompañado en esto.

- No hay nada que recompensar María Elena - dice mi mamá - era nuestro deber ayudarte no podíamos dejarte sola. Y estamos muy felices de que Kilian haya regresado.

- Y estamos seguros que tú hubieras hecho lo mismo estando nosotros en tu lugar. - continua mi padre.

- Eso tenga lo por seguro, saben que pueden contar con nosotros para lo que sea. Ahora creo que llegó la hora de irnos hijo - se dirige a Kilian - tu hermanita debe estar muy preocupada.