"... El mejor reencuentro,
es con la persona
de la que no
te querías despedir..."
Pov Yuta
Casi una semana entera pasó hasta que Sicheng pudo dejar de necesitar ayuda para respirar.
Entre fisioterapia, radiografías y estudios, ambos nos íbamos recuperando a paso lento.
Diez días después, yo ya estaba listo para irme a casa, pero decidieron no darme el alta, porque la recuperación de mi omega era más rápida si su alfa permanecía a su lado.
Yo no me negué a eso, al contrario, me dediqué a mimarlo todo lo que no pude estos meses, darle de comer y acariciarlo hasta quedarnos dormidos, aunque esa parte aún era difícil para los dos, ya que si no era uno, era el otro quién despertaba llorando con pesadillas, que la única manera de calmar era hundir la nariz en el cuello contrario, absorbiendo su aroma hasta que la calma te invadiera otra vez.
Un mes más tarde, por fin, Sicheng ya estaba recuperado y recogíamos las pocas pertenencias que teníamos allí para esta vez marcharnos juntos a casa.
Cuando ya estábamos vestidos, con ayuda de San y Taeyong salimos de aquella habitación.
Sicheng se sorprendió al encontrar a todos los médicos, enfermeros y demás pacientes haciendo un pasadizo en todo el gran pasillo de la planta del hospital.
Caminé unos pasos por detrás de él, mirando a San con complicidad, cuando a mitad de pasillo lo llamé, para que volteara a verme.
Tenía en mis manos un enorme ramo de rosas rojas y acercándome me arrodillé, sacando una pequeña cajita de mi bolsillo y abriéndola frente a él.
-Sicheng, amor, te amo y te prometo que voy a amarte por el resto de mis días, porque tú eres la mitad de mi alma y me haces feliz... así que... ¿Quieres casarte conmigo?-
Lo vi luchar entre secarse las lágrimas, llorar, sonreír, taparse la boca para no gritar y abrazarme...
-¡Claro que quiero!, ¡te amo, Yuta!- chilló abalanzándose a mis brazos, mientras yo lo tomaba por la cintura alzándolo para dar vueltas en mi sitio con él.
Una enorme ovación se oyó por parte de todos los presentes y juntos lloramos mientras nos besábamos.
-Nunca había visto una pedida de matrimonio en un hospital- dijo sonriente.
-¿Pero cómo lo hiciste?- preguntó curioso.
-Dejé el anillo encargado antes de volar, San lo recogería para entregármelo cuando me buscaran en el aeropuerto, de allí nos iríamos a cenar y te lo pediría en una hermosa terraza con vistas a toda la ciudad, pero bueno, después de l que pasó creo que no había mejor momento que este para hacerlo-
-Te amo, mi alfa y ¿cuándo nos casaremos?- cuestionó llevándose la mano a la boca para pensar.
-Esperen que nazca mi cachorro, así no estoy como una ballena en la fiesta- pidió Wooyoung saliendo de entre la gente.
-Entonces en unos cinco meses será, empezaremos con los preparativos cuanto antes ¿si bebé?- pregunté a mi hermoso omega que tenía los ojitos brillantes de la emoción.
Todos nuestros amigos organizaron una fiesta de bienvenida en la casa de la abuela, se respiraba el ambiente de felicidad y familia.
No fueron demasiadas horas, teniendo en cuenta que Sicheng aún estaba en recuperación y se cansaba con facilidad.
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The Brand Yuwin
FanfictionYuta y Taeyong, dos amigos alfas unidos desde casi el comienzo de sus vidas, se enfrentan a las increibles vueltas a las que los somete el destino. Sicheng y Marc, dos omegas con vidas distintas, que tarde o temprano se cruzan en el camino del otro...