--𝓑𝓸𝓾𝓰𝓱𝓽 𝓵𝓸𝓿𝓮--

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"—buenos días princesa

Me secuestraste—

—y tú ibas a robarme, yo lo llamaría prensar rápido"

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—no olvides comentar y votar⭐️—

1 día para boda...

Las emociones que corrían por las venas de la rubia no podían medirse. Había felicidad, terror, nervios, ilusión, estrés, y muchas más que solo hacían que su cerebro dará vueltas y vueltas sin llegar a una conclusión aparente. Así que Jughead le aconsejó ir a tomar un paseo sola pues Verónica tenía bastante trabajo y no podría acompañarla—claro que la rubia nunca iría completamente sola—así que solo fue a un parque que estaba algo cerca de lo que conocía de la ciudad. Aún que no supiera hablar italiano las personas podían entenderla y con eso pudo comprar un helado para caminar mientras el sol hacía brillar el pasto y las flores.

Cuando llegó a un lugar donde habían mesas para picnics se sentó mientras veía su teléfono y comía su helado, de pronto sintió alguien acercarse a ella por lo que levantó su mirada pero su cuerpo se mantuvo relajado. Una sonrisa amable se formó al ver a la anciana que vendía joyería y seguro sólo venía a ofrecerle.

—Buenos días muchachita—saludó amable—¿no te gustaría alguna pulsera u collar? son de chapa de oro y algunos tienen cristales—dijo mostrándole una caja que tenia la tapa transparente.

Betty asintió y le ofreció a la anciana sentarse junto a ella para que no se cansara en esperarla pues la rubia era algo indecisa. Estuvo viendo algunos collares y en especial uno que tenía una flor que le recordaba a su película favorita que era Enredados, pero también habían otras piezas muy bellas.

—¿Hay algo que te tiene preocupada jovencita?—preguntó de repente.

Betty la miró.

—No... diría que preocupada, más bien me tiene aterrada—rió.

La mujer achicó los ojos con una sonrisa.

—Podría decir que lo que te tiene así es un día importante... pero, tal vez no es lo que pasará ese día, tal vez lo que te aterra es lo que pasará contigo si aún no tienes claros tus sentimientos hacia esa persona e igualmente no tienes claro lo que siente esa persona por ti y sabes que nunca lo sabrás con certeza. Sientes que no estás lista o no eres lo suficiente para creer lo que puede o no pasar ahora en adelante.

Betty quedó en un momentáneo shock. ¿Acaso era una bruja? Esas cosas no existen... ¿Cierto?

—Yo... no se que decir estoy confundida—admitió.

La anciana rió levemente—descuida, no soy una adivina, solo que el anillo en tu dedo y la forma en que tus ojos tratan de buscar algo perfecto mientras otras cosas diferentes pasan por tu cabeza que igualmente tratas de resolver te delatan—explicó—además que podría suponer que has venido aquí por un poco de paz.

—Pues... esta en lo correcto—asintió. Borró su sonrisa y suspiró—pero... no... yo... si tengo mis sentimientos claros, pero es solo que no hemos estado juntos tanto tiempo y ya vamos a casarnos...—tomó una pausa—pero... creo que lo ¿raro? es que no vamos a casarnos porque lo queríamos desde un principio...