Annika
Por la madrugada, cuando me levanto para ir por mi notebook para trabajar, me llevo una sorpresa para nada placentera cuando no veo a Aaron en la habitación. Esperé algunas horas para verlo volver, pero me quede dormida antes de que eso sucediera.
Al despertarme por la mañana e ir al pequeño living de la suite, lo veo doblando las sabanas del sofá.
- Oh, ahí estás. - digo con evidente fastidio.
- Buenos días. - me responde con esa sonrisa amable.
¿Es que no entiende una indirecta? No me extraña que con 35 años siga soltero.
- ¿Se puede saber donde estabas anoche? - le pregunto. Me mira sin entender, pensativo. - Me desperté en la madrugada y no te vi en la habitación. ¿Es que acaso fuiste con Josh? Lo que me faltaría es que alguien de mi familia te vea y piense que son ustedes dos los que son pareja. O peor, que tenemos un trío.
- Te recuerdo que fue tú idea invitar a Josh. Y con respecto a tú pregunta, no estaba con estaba con él, para tú tranquilidad.
- ¿Y dónde entonces? Puedes que no lo hayamos acordado, pero preferentemente me gustaría que no estés sin mi.
- ¿No quieres ponerme una correa? - dice con fastidio, lo que me sorprende. - Estaba con tú padre.
- ¿¡Qué!? - exclamo. - Ahora si que prefiero que hubieras estado con Josh. Empieza a hablar. YA.
- No me podía dormir, acá todo estaba muy silencioso y oscuro. Así que quise dar una vuelta por el hotel, llegué al bar, me ofrecieron algo para tomar y en eso se sentó tú padre a mi lado.
- ¡Ay dios! - exclamo con fastidio. - ¡Aaron!
- Solo hablamos de deportes, tranquila. No me pregunto nada de mi, ni de ti, mucho menos de nuestra relación.
- De la persona que más tenías que mantenerte alejada, se te ocurre ir a sentarte a su lado.
- Oye, él fue quien se sentó a mi lado.
Suspiro irritada. - Solo sigue mis reglas, ¿si?
- Está bien... lo siento.
- Bajemos a desayunar.
Salimos de la habitación, una vez que terminamos de vestirnos. Tocamos la puerta de Josh y este se une. Al bajar, nos dirigimos al desayunador, donde mis padres y mi hermana con Cam, ya están sentados en una mesa. Nos acercamos a ellos.
- ¡Aaron! - dice mi padre con alegría y una sonrisa. - Has logrado despertarte, creí que dormirías toda la semana luego de la paliza que les dimos anoche a Henry y Robert.
- ¿De que hablas, amor? - le pregunta mi madre extrañada, pero sin quitar esa sonrisa de su rostro.
- Anoche Aaron me hizo un favor y suplanto a Michael en unas partidas de bridge.
- Me hubieras dicho que necesitabas a alguien, hubiera bajado. - dice Cameron.
- Aaron estaba ya allí y lo hizo excelente. - sigue diciendo mi padre.
- Si, es muy bueno jugando a las cartas. - digo con una sonrisa fingida. - Ven cariño, vamos a buscar para desayunar.
Los dos caminamos hacía la mesa donde se encuentra el buffet para desayunar. Tomamos un plato y empezamos a servirnos comida.
- Creí que había dicho que no sabías jugar. - digo en un susurro.
- Josh me enseño en el avión. - me responde también en voz baja. - Con honestidad, no supe que hacía la mayor parte del tiempo. Se lo atribuyo a la suerte... o el azar.
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Bajo Contrato
RomanceAaron cree que no puede haber caído más bajo luego de que quebrara su negocio... sin trabajo, sin dinero y próximo a ser desalojado. Pero por un golpe, literal, del destino, conoce a Annika. Ella es una exitosa empresaria, a quien no le falta nada...