Teoría de la Felicidad// Editando

Capítulo 3.- Ocultar

*Narra Ayano*

— Él es muy cariñoso, no tienes porque enojarte — le dije y tome su mano para tranquilizarlo, creo que me sonroje.

Él alejó su mano, sentí que mi corazón dolió, pero no debía demostrarlo, sonreí.

— No estoy enojado, sólo que ese chico no me agrada — me respondió mientras se dirigía a la salida.

Lo seguí.

"Me pregunto porque se puso así, ¿Acaso tendrá celos?" pensar eso me hizo sonrojar.

Alcancé a Shintaro y note que estaba perdido en sus pensamiento. No dije nada, el simple hecho de caminar junto a él me hacia feliz.

Caminamos en silencio hasta llegar a donde nos separamos, él no lo notó.

Reí y le dije — Me gustaría saber en que estas pensando.

Él se sonrojó un poco y creo que sonrió un poco.

"Es tan lindo" pensé.

— Bueno, ya debo irme a casa. Hasta mañana —  le dije.
— Hasta mañana — me respondió.

Cada uno siguió su camino.

(....)

Ya en casa tome un baño y luego comencé a preparar la cena.

Mientras acomodaba la mesa escuche a mis hermanos llegar.

— ¡Ya llegamos! — dijeron Kousuke y Shuuya.
Tsubomi se acercó a donde yo estaba. — ¿Necesitas ayuda? — me preguntó.
— No, gracias — le sonreí. — Vayan a cambiarse y luego bajen a comer — le dije a los 3.

Terminé de servir la cena y ellos bajaron justo a tiempo.

— Mmm... Huele delicioso — me dijo Kousuke.
— ¡Si! Yo muero de hambre — le dijo Shuuya.

Ellos siempre me hacían reír.

Tsubomi se sentó junto a mi.

— ¿Como te fue hoy en la escuela? — me preguntó.

No pude evitar recordar lo que paso con Shintaro y Yuuki. Mire mis manos que se encontraban en mi regazo.

Tsubomi me toco el hombro. La miré y le sonreí.

"No debo preocuparla" fue lo que pensé.

Ella me devolvió la sonrisa, pero su mirada se veía triste.

Terminamos de comer. Tsubomi arreglo la mesa y Shuuya y Kousuke lavaron los platos sucios.

Yo tenía tarea así que me fui a mi habitación para hacerla.

Cuando estaba a punto de acabar alguien toco a mi puerta.

— Pasa — dije.

Era Tsubomi, como esperaba. Ella entró y se sentó en la cama. Yo me encontraba sentada frente a mi escritorio.

— ¿Me dirás que sucede? — preguntó.
— No es nada importante — le conteste. No era algo que quisiera hablar en ese momento.
— Puedes confiar en mi, lo sabes... — cruzo sus brazos. — y tal vez yo podría ayudarte.

Ella tenía razón, tal vez podría ayudarme, así que le conté lo que sucedió a la salida de la escuela.

Cuando terminé de hablar ella suspiro y sonrío como si supiera algo.

— Entiendo cómo se siente Shintaro, yo también me sentiría celoso si alguien toca a la persona que me gusta — se levanto y camino hacia mi, en su cara hubo una media sonrisa.

"¡¿Celos?! ¡¿L-La persona que le gusta?!"

— ¡Y-Yo no le gusto! Y.. — me interrumpió poniendo su dedo sobre mis labios.
— No he terminado — Me dijo. — Yuuki no debería ser tan confianzudo y tu no deberías de dejar que se acerque de esa manera. Y ya va siendo hora de que le confieses tus sentimientos a Shintaro. Los dos se gustan y si hacen una linda pareja — sus palabras me hicieron sonrojar tanto que mis mejillas dolían.
— N-No se de que sentimientos hablas — mentí.
— Shintaro será un tonto que no se a dado cuenta, pero yo no, se nota que lo quieres. Hasta Kousuke y Shuuya lo saben.

"¿Enserio soy tan obvia? Al menos el no se a dado cuenta..."

Miré al suelo, estaba muy confundida "No puedo confesarle que lo quiero, podría perderlo si se entera..."

— Ayano.. Si no arriesgas no ganas... — me dijo Tsubomi, pareciera que leyó mis pensamientos. — Siempre nos dices que luchemos por lo que queremos, ¿Porque no intentas hacerlo?
— Pero que pasa si me rechaza, si deja de hablarme — mis ojos se llenaron de lágrimas. — No quiero que el se aleje.
Ella seco una lágrima que pasaba por mi mejilla. — Piensa lo que te digo hermana.. ¿O acaso piensas vivir siempre con los sentimientos ocultos?

— N-No se — "Podría decirle, Tsubomi dice que yo le gusto..."

En ese momento nuestro padre toco la puerta. — Ya es tarde, deben ir a dormir — nos dijo.
— Si, ya vamos — le respondió Tsubomi. — Me voy, piensa en lo que harás. Buenas noches.
— Buenas noches — le respondí.

Cuando ella cerró la puerta de mi habitación, acomode mis cosas para la escuela y me acosté a dormir.