sᴏʀᴘʀᴇsᴀs
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•El baile estaba por venir, el estúpido y absurdo baile, y si para Ben era importante también debería serlo para mí. Mis amigos estaban emocionados por él (el primer baile). Jay iría con varías chicas a la vez, Carlos intentaba invitar a Jane, y Evie, bueno ella supongo que iría con el enano.
Y, en fin, para no volver el cuento tan largo, justo ahora pensaba en ello mientras Ben intentaba decirme algo de un baile real. Sí, estaba siendo romántico intentando invitarme formalmente.
—Y te llevaré en una limosina sensacional. Mis padres quieren tomarnos muchas fotos. —Les juro que jamás paraba de hablar. Yo solo asentía—. Pero bueno, nos pondremos de acuerdo esta tarde en nuestra cita.
—¿Nu-nuestra qué?
—Cita.
—Pero pensé que sería el jueves.
—Y hoy es jueves.
—No lo es.
—Sí lo es.
—No.
—Mal. —Ben me miraba con confusión y luego sonrió tomando mis manos—. Si lo olvi-
—¡No! Tengo todo listo. "Chica multitareas". —Le sonreí—. Tú solo mantente, ve al lugar y allí yo llego.
Maldije mentalmente mil veces, claro que lo había olvidado. El momento fue demasiado incómodo, hasta que los preciados paparazis llegaron y comenzaron a molestarnos a Ben y a mí.
"¿Habrá propuesta de matrimonio? ¿Cuántos hijos desean tener? ¿Mal tiene el cabello originalmente rubio? ¿Mevie es real?".
Y muchas otras preguntas nos atacaron, aunque por primera vez no me molesté de que nos interrumpieran, hasta que llegó el Hada Madrina ahuyentándolos.
—Gracias, Hada Madrina —fingí sonreírle y me giré para ver a Ben—. Ben, te veo más tarde.
Besé a mi chico en la mejilla y salí corriendo en dirección al bosque, totalmente asfixiada y con ganas de perderme para siempre.
Luego de que me había adentrado, comencé a caminar por este, arranqué un par de ramas de los árboles y jugaba con que era una espada o algo parecido. Mi espíritu de adolescente seguía estando ahí. Además de que necesitaba distraerme de verdad. Me sentía frustrada e indignada. ¿Pedir tan solo una follada era mucho para bajar el estrés?
Yo solo quería liberar un poco de la tensión que sentía en todo mi cuerpo; además, últimamente soñaba con que mis colmillos crecían y que tenía garras y escamas cubriendo sobre mi cuerpo. Segundos después daba un brinco de la cama y mi cuerpo estaba sudoroso y fatigado, entonces venía la masturbación sin hacer mucho ruido, no fuera que luego Evie me atrapara. Cuando quería jadear alto me detenía, no podía vivir tal humillación.
Esa manzanita ya se había burlado de mí sabiendo que tendría que esperar al menos a casarme para sentir a Ben con un poco de menos ropa y directamente sobre mi cuerpo. Maldita Evie Grimhilde.
Y entre que me frustraba más y seguía avanzando, comencé a escuchar un sonido extraño, era como ¿pegajoso?, ¿palmadas?, ¿algo que golpeaba fuerte? No lo sé, pero entre más me acercaba, se escuchaba más claro. Y cuando terminé de mover las últimas ramas y observé al otro lado, tapé mi boca tratando de ocultar una risa.
Chad estaba completamente desnudo y parado frente a un árbol, este se movía fatigado sobre el árbol una y otra vez, juro que se esmeraba por dar todo de él sobre ese arbusto o lo que fuera. Y genial, ahora sus gemidos no saldrían de mis oídos nunca más; además de esas imágenes. Lo alcancé a distinguir de espaldas, pero justo cuando observé mejor, fruncí el ceño, fue cuando alcancé a distinguir unos mechones azules.
Dios santo, no.
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ᴍᴇᴠɪᴇ
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The fantasies | Mevie +18
FanfictionUn dragón y una princesa. «Mal y Evie son las mejores amigas, hasta que Mal descubre la lista de sus fantasías más oscuras». Precauciones antes de leer: - Fanfiction. - Los personajes y la historia original no son míos. - Contenido para mayores de 1...