𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏

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ᴍɪ ᴠɪᴅᴀ
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Luego de ver a todos los de Auradon emocionados con que me casara con Ben. Luego de que me teñí mi propio cabello rubio, de que renuncié a ganarme el respeto de mi madre y del mal, y de que cada cosa y movimiento que hacía era por hacer "feliz a todos" (menos a mí), sentí que, si no hacía algo ya, terminaría convirtiéndome en lo que desee nunca convertirme.

Miles de cosas pasaban por mi mente y corazón, pero principalmente transitaba un deseo inhumano, desde mi cuerpo y hasta mis extrañas. Un deseo que no había podido controlar en lo absoluto, un maldito deseo sexual que no podría satisfacer tan fácilmente. No, ni siquiera una rica y placentera masturbación sería suficiente. Yo deseaba mucho más.

Soy una chica de 17 años, y estoy en la edad para follar como una desquiciada enferma, hasta terminar completamente exhausta y sin oxígeno. Hasta venirme incontables veces y gemir hasta que mi garganta no dé más.

Justo estaba en un momento de mi vida en el que me tenía lástima a mí misma. Había caído tan bajo que tenía que implorar a mi novio porque me tocara un poco, aunque fuese por encima de la ropa. Intenté de todo; besos apasionados, una restregada por encima de la ropa y una toqueteada. Intenté practicarle quién sabe cuántas cosas. Pobre chico, lo dejaba lo más caliente y rojo posible, pero cuando estaba a nada de hacerlo llegar, se detenía, y eso me daba incluso más asco.

Y no, no me basaré en él para contar toda la historia, pero Ben tiene ¿la culpa?

Nada, absolutamente nada me funcionaba. Y lo peor, ya ni siquiera recordaba cuándo fue la última vez que llegué al orgasmo o que sentí algo dentro.

Ay... cuánto comenzaba a extrañar la Isla. Sexo por donde sea, cuando quisiera, con quien quisiera y a todas horas. Mi vida era sexo, sexo y más sexo desenfrenado.

En fin, si quieren saber el resto, tendrán que acabar esta historia.


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ᴍᴇᴠɪᴇ

The fantasies | Mevie +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora