The fantasies | Mevie +18

𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏𝟕 | 𝐒𝐁

sᴇɴᴛɪᴍɪᴇɴᴛᴏs
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Era la mañana cuando comencé a despertar y esta vez podía sentirme segura de saber de quién eran los brazos que me rodeaban. Sonreí, de alguna manera eso me emocionaba y me hacía sentirme satisfecha. Evie continuaba acariciando mi tatuaje de ella, mientras balbuceaba un par de cosas, yo inhalé el olor de su cuello, eso era vida.

Poco después comencé a mirar cómo dormía tranquilamente y yo no dejaba de pensar en lo hermosa que ella era. Su perfil era mil veces mejor que el de una princesa de cuento de hadas, y yo no tardé en reconocer que jamás había visto una belleza como la de ella.

Evie era mi mejor amiga desde hace años, nunca pensé verla de esta forma o experimentar algo como lo que sucedía recientemente. No sabía si se debía al sexo, a la atención, al drama de cada día, pero me gustaba estar así con ella.

Después de un rato ella comenzó a despertar, estrujándome más contra su hermoso cuerpo, y sentí cómo jugaba en mi cadera desnuda bajando con dos dedos delicadamente. Yo sonreí y ella abrió un ojillo para observarme sospechosamente, cuando menos imaginé me había robado un beso en los labios.

—Buenos días —dijo y yo no pude pasar por alto el hermoso brillo que tenían sus ojos al despertar, pero cuando noté que ella se dio cuenta de que la observaba detalladamente, desvié la mirada rápidamente.

—Buenos días, E.

—¿Sabes qué hora es? —preguntó luego de girarse para estirarse un poco.

—No tengo idea. ¿Dormiste bien?

Ella asintió, luego dio un brinco de la cama y caminó hasta el baño, yo me levanté buscando mi ropa y me cambié. Después de 24 minutos ella regresó completamente aseada y yo entré en el baño. Ya que salí ella estaba sentada sobre la cama lo bastante pensativa y me senté a lado de ella mientras ella estaba con la vista clavada en la nada.

—M...

—¿Qué pasa?

—¿Has pensado en regresar a Auradon? —preguntó y yo sentí un retorcijón en el estómago.

—Sí...

—¿Y lo harás?

—Aún no lo sé. —Ella me miró a los orbes y luego se levantó solamente asintiendo—. Supongo que Ben no tardará mucho en volver pe-

—¿De verdad estás considerando quedarte?

—Sí.

—¿Incluso después de...?

—¿Después de qué Evie?

Vi que negó y luego me dio la espalda, entonces me levanté para acercarme a ella e intentar abrazarla.

—Eres una egoísta de mierda —dijo y me empujó, antes de salir de su habitación, yo la seguí.

—Evie, ¿qué pasa?

—Nada.

—Dime.

—Solo olvida que te dije algo.

—Evie.

—Te dije que no quería hablar nada más.

Yo solo asentí, ambas salimos de su casa y caminamos de regreso a la guarida. Durante el camino noté que seguía muy ¿molesta?, y aunque quise entender qué le pasaba, me fue imposible.

Cuando llegamos subimos, y el resto de la mañana estuvo evitándome a pesar de que estábamos juntas. Hice miles de intentos para intentar acercarme a ella, pero parecía que nada funcionaba.

La verdad era, que ni yo misma tenía idea de qué era lo que iba a hacer, seguía tan confundida con todo que, si fuera por mí, desaparecería de la faz de la tierra ahora mismo. Pero no, no se trataba de ello, se trataba de saber afrontar los problemas y salir adelante.

—Evie... —Me acerqué hasta ella, mientras se encontraba viendo por la ventana—. No puedes enojarte.

—No estoy enojada.

—Pues eso no dice tu voz, ni tus expresiones y gestos.

Ella se quedó un momento seria y luego yo me recargué en la ventana viendo al igual con ella. A lo lejos se alcanzaba a ver Auradon y creo que destacaba entre todo, después de todo era la parte más colorida "en la Isla".

—¿Te fuiste por lo que pasó con nosotras?

—¿Qué? No.

—Mal.

—Evie, lo que pasó allá solo fue la diminuta gota que derramó el vaso. Sé que todos los de Auradon esperan que me case con Ben y sea la reina... Pero... no estoy segura de querer eso. —La miré un momento y luego suspiré viendo de nuevo hacia la ventana—. ¿En serio crees que soy egoísta por querer quedarme aquí? —Creía entender por qué me llamó así—. ¿Tienes una idea cómo fingir y hacer como que sientes algo que no está aquí? —apunté mi corazón.

—Mal, yo.

—No Evie. Estoy harta. No es justo para mí... Así como tampoco es justo para Ben, ni para nadie de Auradon.

—Lo siento Mal, no debí decirte eso. —Nos miramos a los ojos y luego ella me dio un abrazo, inmediatamente se lo correspondí—. ¿Prometes que nunca nos vamos a separar aunque estemos en diferentes partes?

—Siempre voy a estar para ti sin importar nada. —Sujeté su mano—. Eres mi mundo Evie.

—Lo siento. No sabía lo que estabas pasando. Como toda iba muy bien para mí pensé que lo iba para ti también. —Ella me miró y yo no pude evitar perderme un momento en sus mates, era tan genuina y lo más puro para mí—. Debiste contarme.

—No quería decepcionarte, y realmente quería irme.

—No te hubiera detenido de saber lo que pasaba.

Evie se acercó hasta a mí, separó algunos mechones rosas de mi cara, y sin pensarlo más, unió nuestros labios en un tierno y esta vez lento beso.

Te amo, M... —susurró luego de besar de nuevo sobre la comisura de mis labios.

—Te amo, E.

And you can find me in the space between

Where two worlds come to meetI'll never be out of reachCause you're a part of me so you can find me in the space betweenYou'll never be aloneNo matter where you goWe can meet in the space between

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ᴍᴇᴠɪᴇ

Nota de autora (recuerdo):

Hola, mucho gusto. Primero que nada, quiero agradecerles por llegar hasta aquí y porque ya casi llegamos a las 2K de vistas en dos semanas y media. Muchas gracias por el apoyo y el tiempo de leerme. Esta historia es de ustedes.

Deseo que lo sigan disfrutando tanto como yo, y mis mejores deseos y amor para cada uno de ustedes.

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Muchas gracias.

Jazmin Grey