Lejos De Nuestra Constelación

Frágil

8:34 am.

Apenas pude abrir los ojos, tenía mucho sueño y un poco de resaca, volteé a ver a mi acompañante y ella dormía boca abajo. Traté de no moverla tanto y salí de la cama directo a bañarme y buscar una pastilla para aliviar ese terrible dolor de cabeza.
Sonó mi celular.

Me di cuenta que era un e-mail así que lo abrí.

Era Esteban.

Querida Calle.

Sé que eres más de cartas y todo lo romántico, pero la verdad sabes que odio hacer eso… pero por ti haría una excepción, quiero que me recuerdes como alguien que te quiso y cambió por ti.
La carta se la di al portero de tu edificio esta mañana. Leela y entiéndeme.
Te quiero.

Estaba muy confundida, a qué se refería con "recordar", me olvidé de mi horrible resaca y me dirigí a la recepción sin importar nada, tenía que leer esa supuesta carta pronto.
— Hola buenos días. — Saludo amablemente la recepcionista.
— Buenos días, podría decirle a mis amigos que tuve que salir… y por favor en la habitación 32 lleve el desayuno y una pastilla para el dolor de cabeza. — La recepcionista asiento y salí del hotel, tomé un uber y le di la dirección de mi apartamento.

Treinta minutos sufriendo con la intriga, pero por fin ya llegué al apartamento.
— Hola, ¿de casualidad no dejaron algo para mi? . — Mi impaciencia se podía notar a kilómetros, al parecer. El portero buscó rápidamente entre algunas cosas y tomó un sobre.
— El joven Esteban me dejó esto y dijo que se lo diera. — Me extendió el sobre, lo tomé y le di las gracias. Tomé el ascensor y me dirigí a mi piso, rasgué el papel para poder abrirlo.

Mi corazón estaba acelerado y mi cuerpo empezaba a temblar. Ojalá solo estuviera exagerando. Saque la supuesta carta.

Querida Daniela.

No se como iniciar una carta y lo sabes perfectamente,asi que solo haré el intento.
Recuerdo que cuando nos conocimos fue en el cumpleaños de Dennis, fue el primer día que te vi y sinceramente te me hiciste muy hermosa.
Te acercaste a mi buscando la mesa de dulces, te llevé a ella y ese día vomitamos mucho chocolate y nos hicimos amigos. Cuando empezamos el bachillerato te pedí que fueras mi novia porque en verdad mis sentimientos me superaron contigo.

Recuerdo cuando terminaste con Matías, me dijiste que el corazón ante el amor era frágil… ahora lo entiendo.

Te presente mi corazón y lo dejaste como el vidrio… frágil a todas horas.

En este caso se que tu me lo prestaste. Ahora yo también experimento ese sentimiento y se que tu también, por que a pesar de todo me quisiste y yo lo hice igual.

Benjamín tenía razón, no te mintió, perdoname. Hace un año mi papá hizo algunos negocios que no salieron bien, hasta que llegó un momento que estuvimos en quiebra y él me obligó a sacarte dinero sin que se dieran cuenta, no sabes cuanto me arrepiento de todo eso. Confiabas en mí y mi papá lo usó en tu contra. Te trataba mal por el sentimiento de culpa, pero te seguía queriendo, fui y soy un idiota. Cuando mi mamá se enteró de lo que te estábamos haciendo se decepcionó de mi y de él según su esposo y haci fue como le pidió el divorcio.

Me arrepiento de todo lo que te hice pasar a mi lado, siempre te quise eso no lo dudes, pero te trataba mal. Tenías razón cuando dijiste que las personas podían cambiar. Tomé la decisión de dejar todo esto, quiero volver a ser el mismo de hace cinco años, así que me voy, ¿a donde?, creeme que ni yo lo sé, tal vez tome el primer avión que salga. El tiempo lo cura todo ¿no?.

Tampoco sé si regresaré, pero si lo hago trataré de no entrometerme en tu vida. No quiero arruinarte otra vez. Cuidate.

Me voy porque quiero pensar y no lastimarte más. Se que te decepcione y si… tal vez yo era el villano.

Te quiero y perdoname.

Con cariño, Esteban.

En estos momentos ya ni siquiera podía respirar, el sentimiento de tristeza se instaló rápidamente en mi. Los recuerdos dolían y cada vez sentía que mi corazón se iba oprimiendo.

Escuché mi celular sonar y el nombre de Poché apareció en la pantalla, dejé que sonara y no contesté. En estos momentos no quería a nadie, solo quería estar sola y pensar.

Una parte de mi se sentía muy mal de lo que hizo Esteban, pero la otra parte se sentía orgullosa de él porque de verdad puso fin a algo que estaba mal, se enfrentó a sus miedos.
Su padre nunca se interesó por él y su hermano, siempre les daba lo que querían pero nunca estuvo para ellos, solo le interesaba su empresa y estatus social. Esteban era un chico dulce, pero ahora veo por qué el cambio, él siempre decía que nunca sería como su padre… pero casi se convierte en él.

Los monstruos del pasado suelen convertirte en uno, en ti esta no serlo.

Aunque doliera no tenerlo cerca, sabía que él ahora podía ser feliz lejos de lo que le hacía daño.
Decidí salir del departamento e ir a donde sea, las llamadas en mi celular no cesaban y la verdad no pensaba responder ninguna. Tomé las llaves y me dirigí al último piso.
Me monte en mi auto y empecé a conducir, llevaba quince minutos en carretera y entonces me di cuenta que estaba conduciendo directo al aeropuerto… tal vez eran las esperanzas de volverlo a ver y abrazarlo.
Observé una pequeña montaña y me dirigí hacia haya, apague el auto y empecé a subir a pie. Cuando llegué a la cima se podía apreciar la ciudad, me senté en la tierra y me dispuse a pensar de forma clara.

~dinvar
Haveces los monstruos se convierten en nuestros amigos o nuestros enemigos.
Pero la vida es un peligro ¿no?.