Stay Strong - Edward Styles [Sin Edición]

Capítulo 50

-Edward.

Después de cortar la llamada y posiblemente lograr que ella me odiara, camine hacia mi habitación antes de que Liam llegará, entre en esta y con una sonrisa me despedí, bajé las gradas de la casa sin ganas justo cuando el castaño y el moreno tocaban la puerta, sin decir nada salí por está y camine hacia el auto con ellos siguiendo mis pasos, al entrar en el vehículo lo pusieron en marcha y nos dirigimos hacia la corte, 4 horas escuchando pura mierda, y otras 2 esperando a que dijeran lo que quería oír.

-Edward Styles, por los delitos ya mencionados anteriormente, usted es declarado culpable, su condena mínima es de 15 años con un pago mayor que se le informará a su abogado- y después de escucharlo, sonreí mientras veía a Jose, el correspondió, y formuló una amenaza con los labios, "Arderas en el infierno".

Ese mismo día me trasladaron a las afueras de Londres, la cárcel más "peligrosa" por así decirse, no salía de mi celda, tenia que estar un mes encerrado, y después podría salir, no podía tener visitas, ni contacto con los reclusos del lugar.

Paso un mes y me dejaron salir para "convivir", no podía confiar en nadie, podía haber alguien mandado por Jose, o por Mike, tenia dudas, Sedd me había dejado una gran intriga aquel dia, camine fuera de la celda, todo estaba cerrado, todo era plomo, Gris, y Azul.

Me senté en una banca un poco alejada del resto, algunos me miraban tratando de intimidar, pero yo les sostenía la mirada hasta que me dejaran en paz, vi como un hombre casi de mi altura y porte veía hacia mi cuello, entonces recordé que lo único que me habían dejado conservar fue dos fotos y mi cadena de plata, entendí la ambición de aquel hombre, me acomode el cuello del "uniforme" para que dejará de mirar, funcionó.

-Hey, chico nuevo- me llamo alguien desde atrás, me di vuelta, era un niño.

- Tu que- le pregunte mientras no le tomaba mucha importancia.

- Yo nada, solo quiero hacer amigos, tu pareces fuerte- respondió el, y yo lo mire de pies a cabeza, como el había echo.

- Y tu, no parece que tuvieras ni salud- le respondí y me apoye a la pared.

- Mira, si ando contigo, no podrán hacerme daño- dijo el mientras se emocionaba, o eso parecía.

- Olvídalo, no soy tu niñera- le informe y el soltó un suspiro.

- Bien, escucha, no soy mala persona, yo estaba aquí por mi hermano, pero alguien lo apuñaló mientras dormía, yo cumplo su condena- explicó mientras se agachaba.

- Casi me convences- respondi mientras reía.

- Que, como sabias que no era verdad- pregunto exaltado.

- Porque desde que te acercaste, ves como baboso el dije que llevo en mi cuello- respondí y me levante.

- Oh, tranquilo amigo- pidió mientras me miraba.

- No te metas en problemas- le recomendé y camine hacia el otro lado a modo de conocer el lugar.

- Si fuera tu, no me acercaría ahí- volvió a hablar, a unos metros se encontraban varias personas reunidas en círculo.

- Que pasa ahí- le pregunte mientras paraba.

- Marcel peleará con Zun- dijo el mientras apuntaba a un hombre de mediana estatura lleno de tatuajes.

- Marcel- le pregunte mientras observaba al hombre.

- Es Frank, no le digas Marcel, odia que lo llamen así- volvió a explicar.

- Y porque pelea con Zun- volví a cuestionar.

- Porque Zun es nuevo, todos los nuevos pelean con Frank, siempre gana el- respondió y yo empecé a caminar hacia el lugar en el que todos se reunían.