Maratón 2/3
Una semana sin Sebastián. Sin sus mensajes, sin sus llamadas.
Esta semana se me ha hecho larga. Lo extraño, no puedo negarlo.
Ya estaba acostumbrada a él. A recibir algún mensaje suyo que me sacara una sonrisa o incluso una llamada a mitad de la noche.
Él dijo que me esperaría y no pude responder. No me siento lista para lo que sea que pueda pasar... Tampoco he querido pensar en lo que siento por él. Empecé jugando con fuego y me termino gustando. ¿En qué momento pasé a sentir algo?
Debí saber que se volvería un vicio la primera vez que estuve con él. Sebastián fue ganándome poquito a poquito.
Detalles... Esas son las cosas que enamoran a las mujeres supongo, pero tengo miedo. Con el tiempo todo cambia; las personas, los sentimientos.
No puedo permitirme tener esperanzas. Sería demasiado estúpida si me confío.
Él no puede ser perfecto, no puede ser siempre el caballero que se muestra conmigo...
Es todo muy apasionante ahora, pero ¿Y en cinco años?, ¿En diez?
Tengo una hija en la que centrarme, no puedo seguir pensando en Sebastián. Por mucho que él asegure que va a esperarme, no puedo permitir que eso aflore ilusiones.
Mi enfoque es y tiene que ser Anne. Ya tenemos una rutina juntas y me gusta. No es que siempre hagamos lo mismo, pero las tardes son nuestras. Estoy con ella desde que paso a buscarla al Jardín de niños.
Hemos visto películas, hecho galletas, también hemos salido a pasear y si, obviamente compramos algunos vestidos. Esta niña ama ir de compras y yo amo ir con ella.
Quedan tres semanas para el juicio y yo sigo nerviosa. Estoy durmiendo poco, pensando más y debatiendo internamente mis decisiones. Trato de evitar pensar en el futuro, porque en este momento para mi es incierto.
¿Qué haría si Benjamín se sale con la suya?, ¿Volvería con él?
Aceptarlo sería una forma de morir lentamente.
Ya no puedo con mis pensamientos, en ese aspecto aun soy débil.
Ojalá pudiera controlarlos.
***
Segunda semana.
Ya me siento un poco mejor. El nudo revuelto en mi cabeza se ha disipado y por fin me siento más tranquila aceptando que no puedo seguir dándole vueltas a todo, al final solo me hago daño a mí misma.
Pase lo que pase, sabré afrontarlo en su momento, de nada me sirve sufrir ahora.
Mark y Alyssa me llaman seguido para preguntar como estoy, también hablan con Anne. Alyssa vino a vernos el otro día y solo con su presencia todo parecía tener más color.
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En los brazos de otro [COMPLETA]
Storie d'amoreNo era nuestro momento, lo sabíamos... Estar juntos no era lo correcto. Pero, ¿Qué pasa cuando el deseo es más fuerte que la razón? Hay cierto placer en lo prohibido...