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Escuchaba que me llamaban de lejos pero estaba demaciado cómodo para levantarme, abrase con más fuerza mi almohada. - Cinco minutos más Emma -. Susurré con cansancio.
- Sano-kun! -.
Mmm senté al escuchar que me seguían llamando es cierto no estoy en mi casa. - Ya voy en cinco minutos bajo! -. Casi grite para que me escucharán.
- No tardes para desayunar -. Escuché a Itsuki del otro lado.
Me comencé a estirar. - Ahh que bien dormí -. Frote mis ojos para despertar completamente.
- Haise? -. Al escuchar la voz a mi lado me frené en secó y gire mi cabeza casi como un robot.
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- Miku? -. Pregunte sin saber cómo reaccionar pues estaba sentada a mi lado con su pijama azul medio abrierta de la camisa.
- Esos son tatuajes? -. Ella me veía con sorpresa y entonces recordé que me quité la playera antes de dormir.
- Ehh? -. Rápidamente tome las cobijas para cubrirme. - Que haces aquí? -. Pregunte asustado que ella viera mis tatuajes.
- Anoche fui al baño y creo que olvide que estabas aquí -. Respondió tímidamente. - Pero esos si son tatuajes verdad? -.
- Ésto yo, eh cómo -. Estaba balbuceando como idiota pues no sabía que responder y lo único que se me ocurrió fue arrodillarme frente a ella. - Por favor no le digas a nadie -. Dije rápidamente con mi cabeza en el suelo sin mirarla.
- Puedo verlos? -. Ella pregunto.
- Eh? Uh está bien -. Me puse de pie y me senté junto a ella con el brazo extendido.
Ella comenzó a tocar mi brazo y costilla izquierdos dónde estaba los tatuajes. - Desde cuándo los tienes? -. Pregunto aún pasando sus manos sobre mi.
- Uh me los hice poco antes de cumplir 11 años osea aproximadamente hace 6 años -. Respondí nervioso de sentir su toque que era muy suave y cuidadoso.
- Los hiciste desde tan pequeño? -. Pregunto sorprendida.
- Si, fue por una promesa que hice con mi mejor amigo si el se tatutuaba la sien yo me haría éstos -. Respondí recordando los buenos tiempos.
- Ya veo fue para que no lo hiciera solo, eres alguien bueno Haise -. Ella dijo con una sonrisa bastante linda.
- Jaja pero mi abuelo casi se infarta cuando me vió -. Respondí riendo un poco, se siente bien poder hablar de esto con ella.
- Jaja me imagino, pues su nieto de aún 10 años llegué un día con estos tatuajes cualquiera se infarta -. Ella acompaño mi risa con la suya. - Por cierto esa es tu cicatriz verdad? -. Ella pregunto señalando mi costado derecho donde estaba la cicatriz.
