Oculto en tu mirada

Capítulo XXIV. No he sido completamente honesto contigo

Nota

Los tres asteriscos (***) indican el inicio de los sueños de Jane. Hay muchas cosas que ocurren en sus sueños que están relacionados con su vida y su pasado:)

Jane

***

¿Australia?

La luz de la luna era lo único que iluminaba el ambiente. No pude analizar todo a mi alrededor, pero definitivamente estaba en Australia. Podría reconocer esta calle en cualquier momento, habían pasado tantas cosas aquí.

Comencé a caminar a través de la oscuridad, observando todo lo que me rodeaba. Una extraña vibra recorrió mi cuerpo, sabía la razón por la que estaba aquí. La razón por la que estuve caminando por esta calle, esa noche antes de tomar mi vuelo a California, regresó a mi memoria.

Di un paso hacia adelante y escuché que algo crujía debajo de mi zapato, me agaché para recogerlo. Vidrios rotos y una fotografía debajo... Escuché pasos a lo lejos, alcé la mirada y pude ver una sombra, entrecerré los ojos para poder ver mejor.

—¿Hola? —intenté llamar la atención de la persona enfrente de mí—la sombra comenzó a tomar más forma conforme se iba acercando—¿mamá?

Efectivamente era ella, esa mirada materna inundó sus ojos. Acarició mi mejilla como siempre lo hacía cuando estaba pasando por un mal día y ella estaba ahí para reconfortarme.

—¿Qué haces aquí? —pregunté asustada—no deberías de estar aquí. Sabes lo que pasó esta noche.

Ella no respondió. Solo señaló la fotografía que aún tenía en mis manos. En la foto había dos personas, Jack y yo. Él estaba detrás de mí, me rodeaba la cintura con sus brazos y recargaba su cabeza en uno de mis hombros, ambos estábamos sonriendo.

—¿Qué sucede? —alcé la mirada, pero ya no estaba mi mamá.

Era como tu reflejo en un espejo. Ahí estaba yo, frente a mí. Por más extraño que parezca, me podía ver a mi misma en carne y hueso solo a un paso de distancia. Abrí los ojos asustada por lo que tenía enfrente.

—Ve de nuevo—señaló a la fotografía otra vez.

La fotografía era la misma, a excepción de un detalle importante. Jack ya no estaba ahí, solo me encontraba yo en la posición de antes.

—No entiendo—dije confundida.

—Vamos—sonrió (o sonreí, la verdad no lo sé) con mucha soberbia—sabes lo que significa, solo piénsalo un poco más.

Me quedé en silencio analizando cualquier posibilidad. En el fondo sabía todo lo que significaba la fotografía y el estar aquí, en esta calle, a la luz de la luna.

—No puedo huir. Tengo que enfrentarlo todo si aún quiero estar con Tom—la fotografía cayo lentamente al suelo después de soltarla.

—Pensé que eras más lista—escuché una voz detrás de mí.

—Sara—dije rápidamente, miré hacia enfrente y mi reflejo ya no estaba ahí. Giré hacia mi mejor amiga.

—Vamos Jane, falta poco. Tienes que saberlo. Tienes que salvarte.

—¿Salvarme de qué? —añadí confundida.

—De lo que tanto te has esforzado por evitar—terminó diciendo.

—Mi pasado—dije convencida.

Sara asintió con la cabeza. Una corriente fría envolvió mi cuerpo, enfrentar todo por lo que estoy huyendo me aterra. Sentirme débil no es una opción más, y el solo pensar en lo que había pasado me quita cualquier rastro de poder que podría tener.