Después de lo que me dijo Yves quedé aún más confundida, no me sentía capaz de hablarle, aunque me sentía mal por ello.
Regresé a mi salón, estaba muy distraída.
— ¡Eh, oye!, ¿me podrías pasar mis cuadernos? — era Málory, no me acordaba de que le había pedido prestado sus cuadernos, miré mi morral y ahí estaban, al menos, al menos.
— Aquí tienes — dije mientras se los pasaba —. Gracias.
— Con gusto —. Inconscientemente me dirigía hacía Yves, se veía muy agotado; estaba tan cerca, pero no fui capaz de hablarle, sólo me senté en mi puesto, como si nada. La profesora había llegado, y comenzó a dar la clase, no lograba concentrarme, no dejaba de pensar en lo que sucedió hace un momento.
— Señorita Dafne — la voz de la profesora me hizo regresar.
— ¿Sí? — dije con incredulidad.
— ¿Puede responder a la pregunta?
— ¿Cuál es la pregunta? — en serio no la sabía.
— He notado que has estado muy distraída y no debe ser así, podrías reprobar por distraerte tanto — ¿y yo qué puedo hacer? Me decía, no podía contarle a la profesora lo que ocurría.
— Trataré de mejorar — dije y siguió dando la clase normalmente. Al finalizar, Yves se levantó de su puesto, estaba muy pálido, y de repente cayó al suelo, salí corriendo hacia él, se había desmayado; todos se tornaron alrededor de él.
Se lo llevaron a la enfermería y la profesora me escogió para que lo acompañara —: eres la amiga más cercana a Yves — me dijo; tenía que suceder en este momento cuando la relación entre nosotros no iba bien, pero sentía que debía hacerlo, se lo debía. Lo acompañé y esperé a que despertara, vi como abría los ojos, en realidad me sentía preocupada.
— ¿Cómo te sientes? — pregunté.
— Estoy mucho mejor — dijo, estaba tensa, no era capaz de mirarle a los ojos —. ¿Qué me sucedió?
— Simplemente te desmayaste — le dije con naturalidad. No quería interrogarlo, no era un buen momento —. Debo regresar a clase, les diré a todos que estás mejor — salí del cuarto, quería arreglar todo, mas no poseía el suficiente valor para entablar una conversación normal con él, debía hacer algo o perdería a mi amigo lentamente.
Entré a mi salón, todos me miraban, querían saber una respuesta.
— Está bien — dije sin ganas y me ubiqué en mi lugar, todos me seguían con la mirada, ¿es qué no entienden el concepto "está bien"? Creo que no, todos querían más detalles, se les notaban, pero no se atrevían a preguntarme algo al respecto. Se me notaba que era incapaz de hablarle a Yves y esto no podía seguir así.
Terminaron las clases y me dirigí a la enfermería. Estaba de pie observando la puerta de la habitación, levanté la mano, pero no fui capaz de entrar, no me atreví a visitar a mi amigo, tenía mis razones para no hacerlo; ¿y cuáles eran? ¡ninguna! Era una completa idiota. Espero que te mejores, susurré para mis adentros.
Salí del colegio y me dirigí a casa; todo se sentía tan vacío sin él.
Nuestra madre nos recibió con un cálido saludo, fui a mi cuarto, siempre lo hacía cuando necesitaba tiempo a solas, tenía que despejar mi mente y no tenía en qué confiar, sólo pasaría un largo tiempo analizando cada situación.
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El Juego De Niel
Misterio / SuspensoNunca pensé que llegaría a hacer esto, no imaginé que llegaría hasta aquí. Se podría decir que me he vuelto una asesina; antes creía que matar a las personas era horrible y ahora ya no me importa, he cambiado mi forma de pensar, y por ello estoy aq...