Super Trouper - Zhuiling

Donde descubren la verdad - Parte 2

—Gege, por favor sigue cuidando de mi.

—Gege eres tan hermoso como un ángel. No necesitas a todas tus conejitas, yo puedo ser el único para ti.

—Gege~ déjame aferrarme a tu pierna mientras hago pucheritos y te coqueteo.

Jin Ling levantó la mirada del cojín donde había enterrado su rostro como una manera de ocultar su vergüenza. Frunció el ceño al ver como aquellos que clamaban ser sus amigos le "imitaban" de forma burlona. Voces fingidas con una dulzura excesiva, expresiones que rayaban en la cursilería y, lo peor, los húmedos sonidos de besos al aire con las manos sobre sus corazones.

—¡Gege!

—Gege~

El pobre manager no lo soportó más.

—¡Dejen de inventarse cosas!—gritó deshaciéndose del cojín entre sus manos. Lanzándolo al compositor y sonriendo al notar que el su ataque había dado justo en su rostro.

Una lastima que el cojín era un arma bastante inútil al no causar daño alguno, pero por lo menos Zizhen había parado su ridículo intento de imitación, lo que no espero fue que el compositor rompiera en risas.

—¿Inventar? Pero A-Ling, tú dijiste esas cosas.—atacó la chica con una sonrisa divertida— Nosotros solo estamos repitiendo lo que tú dijiste, en televisión nacional.—Hizo hincapié en la última parte.

El manager chasqueó la lengua tomando un nuevo cojín para lanzarselo a la castaña pero para su mala fortuna, esta consiguió esquivarlo a tiempo.

—No todo. Jamás en ese tono, y mucho menos haciendo esos gestos tan ridículos.—aclaró cruzándose de brazos.

—Oh, son cosas que no dijiste pero estoy segura que pensaste.

—¡A-Qing jamás he pensado en algo así!

Si A-Qing no hubiera cerrado los ojos mientras reía, habría podido evitar el tercer cojín que Jin Ling lanzó.

El castaño tomó el último cojín de su sofá, apoyando su rostro entre la suave tela antes de dejarse caer de lado para hacerse bolita.

No necesitaba que sus amigos le recordarán lo risible que había sido su comportamiento en el programa. Gracias al descanso su mente se había aclarado, y ahora era capaz de rememorar cada uno de los vergonzosos momentos en el programa.

Lo cual no era algo bueno.

A esas alturas, estaba seguro que su fama de ser un "Manager demonio" había sido reemplazada por la de "Manager inmoral".

Abrazando y aferrándose a Sizhui, usando una técnica tan barata como aprovecharse que el cantante jamás podía negarle algo y todo para ganar un tonto juego. Exigiendo ser tomado en cuenta cuando el idol no estaba obligado a hacerle la vida más fácil...

Ah.

Jin Ling deseaba no volver a salir de su departamento.

Zizhen y A-Qing habían estado riendo, hasta que notaron como el castaño se había abrazado con mayor fuerza al cojín, a un punto en que parecía que este explotaría.

—A-Ling, es solo una broma. —Zizhen paró de reír, acercándose a su amigo para posicionar una mano en su hombro. —¿Estás bien?

La preocupación en la voz de Zizhen había sido notoria para el manager.

No quería hacer un problema de todo lo que estaba pasando, menos que sus amigos estuvieran inquietos por su culpa.

Pero, ¿realmente estaba bien?