Capítulo 11

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- Que tal si me dices que me perdonas por ser un idiota aquel día.

- Dame una razón - digo con voz firme a pesar de que estamos demasiado cerca y eso me está afectando.

- Porque quiero hacer algo después y necesito una respuesta – hace una pausa- aunque – me escanea y detiene su mirada en mi boca - sea cual sea la respuesta, lo haré – vuelve a conectar su mirada con la mía - sólo que, si me dices que no, me llevaré seguramente una buena bofetada como bonus.

- En ese caso – me pego más a él y dejo mi rostro a un milímetro del suyo cuando se acerca lo volteo y me acerco a su oído - ¿por qué no haces lo que quieres hacer y en dependencia de lo que hagas – hago una ligera pausa y lamo el lóbulo de su oreja - te doy una respuesta?

- También me parece – me toma la parte trasera de mi cuello - una buena idea.

Y así sin más, junta sus labios con los míos pegándome más a él si eso es siquiera posible, pero me separo y miro su mirada confusa.

- Creo que ... - lo cojo del cuello y uno sus labios con los míos. Noto como sonríe, pero no se separa de mis labios.

¡ Sonrío en medio del beso!

Me levanta en peso haciendo que enrolle mis piernas alrededor de su cintura mientras aprieta mi trasero y me sigue besando.

Punto para Adom.

Su lengua se abre paso en mi boca y Cristo este chico si sabe dar un beso con lengua.

- ¡¿Adom, hijo, estás ahí?!

Nos separamos.

Miro a Adom y a mini Adom y vuelvo a mirar a Adom con esos labios carnosos rojos e hinchados que me reclaman por no darles atención.

- Mierda, te ves super follable.

- Tú también, mucho - me muerdo mi labio inferior inconscientemente.

- Seda si no quieres que olvide que mi mamá está a dos pisos y te folle deja de morderte el labio.

- Lo siento.

- ¡Adom voy a subir!

- ¡No!

- Mierda. Yo me encargo tu trata de no ...

- ¿Imaginar cómo sería verte desnuda y lista para mí a mi merced mientras te embisto una y otra vez sobre esa mesa y gimes mi nombre hasta que te corras? – dice con tono interrogativo y evidente - Trataré.

- Mierda Adom tenemos que hablar de tus distintas personalidades. Me pusiste caliente.

- Era el objetivo, si no es mutuo no sirve.

- Idiota.

Un caliente, sexy y superfollable idiota.

Touché.

La señora Elena, mi futura suegra me cae bien y es raro que alguien como yo que odia al 98% de la sociedad lo diga, pero ahora mismo no sé qué te diga. Deberían llevársela presa por interrumpir tan sagrado momento. Dejar así de cachondo y con esa apariencia superfollable a su hijo debería considerarse crimen.

Dorothea, vagina mía, te compadezco.

A ti te deberían llevar a un psiquiatra ¿Quién le pone nombre a su vagina?

La misma persona que se apiadó de ti y te puso Lela y no sólo conciencia. Además, tu hablas, mi vagina siente y yo hablo y siento, somos el combo perfecto.

Loca.

Amas a esta loca.

- Seda cariño.

A través de la máscara (DISPONIBLE EN AMAZON)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora