Problemas económicos, la necesidad de obtener dinero rápido y la exigencia de cuidar a la familia... Son unos de los tantos motivos que han llevado a Tanjiro, Zenitsu e Inosuke a buscar trabajo desesperadamente en la ciudad, pero, ¿quién dijo que en...
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El autobús andaba a toda velocidad, Sanemi iba en una moto robada atrás del dichoso vehículo, persiguiendolo a toda velocidad y detrás de él iba la policía.
¿Y quienes iban en ese autobús?, nuestro querido Kamaboko Squad, la verdadera pregunta es, ¿cómo acabaron en dicha situación?
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El grupito se estaba preparando, Tanjiro estaba empacando su ropa, este fin de semana irían de campamento.
— ¿Tienes todo? — preguntó Tanjiro a Zenitsu, el rubio asintió, miró a Inosuke —, ¿y tú Inosuke?
— No te preocupes Itadaki — puso una mano en el hombro del pelirrojo —, esas cosas las llevas tu, es solo tomarlas y ya.
A Tanjiro se le tensó una vena del rostro, estaba por decir algo cuando la señora Kamado entró a la habitación.
— Chicos, rápido, tienen que irse ya — alegó tomando la mochila vacía de Inosuke, la miró unos instantes, sin embargo, no valía la pena revisarla, ya sabía cómo era el chico —, rápido Tanjiro.
— Si mamá, ya estoy casi listo — se colocó perfume, cerró su mochila y la tomó con su mano derecha.
Inosuke ya le había quitado su bolso a Kie, Zenitsu ya estaba en el pasillo esperando con ansias para irse de campamento todos juntos.
En el piso de abajo ya estaban los demás, esperando por el trío que siempre llegaba tarde a todas partes.
— Rápido, Rápido, ya Sanemi está que arranca el autobús él solo — Genya ayudó tomó los bolsos de los tres y rápidamente se fue hasta el carro, donde estaba un Sanemi estresado tocandoa bocina sin parar.
— ¡Ya vamos amore Mio! — comentó Inosuke saliendo con todo el estilo que se cargaba encima, como era de esperar subió en el copiloto.
— Muevanse — pidió Sanemi sin paciencia, al estar todos dentro del carro y despedirse de los padres habló —, escuchen bola de mugrosos, todos con cinturón de seguridad, todos con sus documentos, nada de peleas, el primero que empiece lo dejo en el camino.