Tres
No me lo podía creer. En un primer instante, creía que estaba viendo una visión. Suspiré.
Ana, a mi lado, vio mi reacción y abrió los ojos demasiado sorprendida.
-¡Ostras!- exclamó en español.
Vi como Daniel se despidió de aquel hombre y echó a andar hacia donde estábamos nosotras.
Creí que me iba a dar algo cuando pasó por lado y se paró junto a Richard. Miré de reojo a mi amiga, que seguía mirándolo como el que ve a un fantasma.
Debo de reconocer que llevo, "enamorada" como decía la propia Ana, de él desde que lo vi en la primera película de la saga. Parpadee un par de veces e, incluso, me pellizqué disimuladamente, para creerme que lo tenía delante de mí.
Reconozco que era mucho más guapo en persona. Si había algo que me gustaba de él era el color de sus ojos.
- Hola, Richard. ¡Cuanto tiempo! ¿Qué tal todo? - se giró hacia nosotras - ¡Hola!
- ¡Hola!- saludé. ¿En serio había podido articular una simple palabra? Siempre pensé que jamás sería capaz.
- Hola, Daniel. Mira, estas son Ana, ella trabaja conmigo en la nueva obra que vamos hacer y, ella es Mary, una amiga de Ana que ha venido a pasar unos días con ella.
-¡Encantado! Soy Daniel Radcliffe. Aunque por vuestras caras, imagino que ya sabréis quien soy.- dijo sonriendo y alargó su mano hacia mi primero.
Yo asentí, creía que no podía articular alguna palabra más.
Le estreché la mano y una corriente se extendió por mi brazo. El chico hizo un gesto como sorprendido. ¿Lo había sentido él también?
Me iba a volver loca antes de tiempo.
Retiró su mano de la mía y la estrechó con la de mi amiga, que parecía volver a ser ella.
-¡ Hola! Somos super fans tuyas, bueno, a mí me encanta Tom, me van más los chicos malos. Ella, - dijo señalándome, cosa que hizo que me entrarán ganas de matarla allí mismo - es más de chicos buenos. Pero te admiro muchísimo como actor. Me gusta mucho tus películas y tus obras de teatros. Las he intentado ver todas. Es un placer enorme poder conocerte.
Miré a Ana sorprendida, no me esperaba que le soltara aquel discurso. Oí a Richard reír. Yo, no sabía si reírme, llorar, matar a mi amiga o qué hacer.
Seguía sin creerme que lo tuviera delante. Me parecía un chico demasiado normal, simpático y muy agradable. Aunque eso ya lo sabía sin conocerlo.
- Ana... - la recriminé.
Ella se limitó a encogerse de hombros.
- Me alegro que te guste mi trabajo. - dijo y añadió. - Un placer conoceros. Espero veros pronto y ya hablamos, Richard. ¡Hasta pronto!
Hizo un gesto con la mano y volvió su mirada hacía mí. Sonrió.
Noté como en mi cara aparecía otra sonrisa.
¿Me acababa de sonreír a mí? Quizás nos sonreiria a todos y yo pensé eso. Si, eso sería.
Se alejó por el pasillo y yo suspiré.
-¡Guau! Jamás pensé en que lo conoceríamos -dijo mi amiga
- No sabía que os gustaba. Daniel ha trabajado conmigo aquí en el teatro varias veces. Es un chico excelente.
- A Mary no hace falta que se lo digas, a ella le encanta
La miré de mala manera y el director se rió.
- Bueno, chicas os tengo que dejar, tengo asuntos que arreglar. Nos vemos en el ensayo, Ana. Y piénsate eso, Mary.
Asentimos y Richard volvió a entrar en su despacho. Nosotras nos encaminamos hacia la salida.
Hablamos de la impresión de haberlo conocido. De solo pensar en esos ojos, me quedaba en otro mundo. Era obvio que a Ana le gustaba, pero ella veía todo por mí.
En fin, aún seguía sin creerme que lo hubiera conocido.El lunes llegó, y Ana, literalmente, me arrastró al teatro. Por lo que me enteré, Richard y el otro productor, quisieron hacer unas pruebas en el propio escenario. Y allí estaba yo, sentada en las butacas, esperando ver a mi amiga y a sus compañeros ensayar o a lo que fueran hacer. En verdad, no tenía otro plan, era eso o quedarme en el piso de Ana. No me apetecía perderme por Londres.
Vi como Richard y una mujer daban unos papeles, que supuse que sería el guión de la obra, a cada uno de los actores.
De repente, sentí que alguien se acercó a mí. Levanté la mirada y me volví a encontrar con esos ojos azules que tanto me gustaban.
- ¡Hola! ¿Puedo sentarme? Quería ver el ensayo. No creía que viniera nadie más- dijo con una bonita sonrisa.
- Claro, siéntate. - otra vez hablando como si nada.
Y eso hizo. Se sentó a mi lado, tan cerca que casi su brazo rozó al mío.
- ¿Mary, verdad?
Asentí.
- Bonito nombre.
- Gracias- dije y agradecí que apenas hubiera mucha luz porque noté como me sonrojaba.
- ¿No eres de por aquí, cierto?
- Soy de España.
- ¡Oh! Me encanta. Tú no eres del gremio ¿No? Te veo aquí y no ahí con tu amiga...- sonreí ante su respuesta.- Perdona, no quería molestarte. Disculpa.
Respiré hondo y olí su perfume. Olía tan bien...
- No, no, tranquilo, no molestas para nada en absoluto. Total, yo de esto no entiendo mucho. Quiero decir, yo estoy aquí por pasar unos días con mi amiga. Yo trabajo en mi pueblo natal de administrativa en una empresa, así que ya vez lo cerca que estoy yo del gremio.
- Todos los trabajos son dignos. No te preocupes por eso. Se te ve muy buena chica.
- Gra... Gracias
No podía creerme que Daniel Radcliffe me acabara de hacer un cumplido. Suspiré.
No podía creerme lo que me estaba pasando y, mucho menos lo que estaba por venir...
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El verano de mi vida (Completa)
FanfictionMary no sabía todo lo que le podía suceder en Londres cuando fue a ver a su amiga. Conocer al que sería el amor de su vida era una de las pocas cosa que le podían suceder. ¿Y si añadimos que era su actor favorito?