19.

2.5K 296 552
                                    

Los recuerdos y las ilusiones se mezclaban dolorosamente en la cabeza de Tweek, no podía dejar de ver escenarios pasados y, otros, que le gustaría haber vivido antes de decepcionarse. Estuvo dando vueltas sobre la almohada durante horas, la tela se había humedecido y sus ojos cada vez estaban más hinchados.

Las pastillas no habían hecho el mismo efecto que antes a pesar de la cantidad que había tomado. No se sentía feliz y la energía parecía estar destinada para sufrir.

No pudo quitarse de la cabeza algunas decisiones que pudo haber tomado mejor. ¿Qué era lo que tenía él que Wendy no? La posibilidad de ser besado por Stan, tal vez si hubiera aceptado tener sexo cuando se lo pidió, Stan hubiera dejado de lado el pasado con su ex y se centraría en la única persona que lo habría hecho sentir bien.

Era un riesgo. Tweek tenía miedo de lo que pudiera ocurrir después.

El celular vibró en la mesita, era un mensaje nuevo de Craig a pesar del gran historial de ignoradas. Tweek no entendía por qué el azabache continuaba intentando comunicarse por ese medio; pero lo agradecía ya que fue único que lo distrajo de todo barullo que era su mente.

"¿Vendrá hoy?"

Era temprano incluso para desayunar, pero Craig ya estaba levantado pensando en lo que debía hacer durante el día. Tweek se vistió sin mucho interés en verse bien, observó sus ojeras algunos minutos en el espejo y finalmente salió; no quería continuar solo, sabía cuánto podría enloquecer si quedaba a solas con su gran mente.

Golpeó la puerta de la casa de los Tucker, Laura lo abrazó en forma de saludo y lo hizo ir directamente a la cocina mientras ella salía para el trabajo. Craig se encontraba en la mesa bebiendo chocolate caliente y comiendo galletas, tenía la boca llena cuando vio a Tweek en frente. La sorpresa fue evidente en su rostro, pero la alegría lo fue aún más cuando sus labios se curvaron hacia arriba.

—Lo siento, creí que hoy ibas a ignorarme de nuevo —dijo con voz somnolienta.

Tweek se sentó al lado y colocó sus pies sobre la estructura de la silla de Craig. Sin ninguna invitación, agarró una galleta y se la llevó a la boca para evitar hablar de alguna forma. Estaba seguro que le preguntaría sobre lo ocurrido ayer con Stan. En realidad, ya lo había hecho por mensaje.

—¿Estás bien?

—Estoy excelente —contestó luego de tragar.

Craig desconfió de su respuesta, a pesar de tener un aire de preocupación decidió no seguir preguntando, lo que Tweek agradeció profundamente.

Tomó otra galleta y la hundió en la bebida de Craig antes de llevársela a boca. Quizás se estaba tomando más confianza de lo debido, pero su mente estaba lo bastante confusa como para replantear sus acciones.

La casi silenciosa risa del azabache lo había descolocado por un momento, este puso su taza en medio de ambos para que Tweek también bebiera.

—Puedo prepararte café si quieres.

—No, gracias. Prefiero robarle chocolate a la gente discapacitada —sonrió antes de beber unos cuantos tragos y abandonar la taza.

—Estoy ofendido —afirmó mientras hacía un gesto desaprobatorio, intentando reprimir una sonrisa.

—Ten, no te enojes —dijo. Le dio una galleta y luego le dio unos golpecitos en la espalda, restándole importancia en todos los sentidos.

Tweek se desperezó en su asiento, ya era la hora de salir hacia la preparatoria. Se acercó lo más posible a la puerta con la bicicleta para que Craig se sentara y acomodara las muletas entre ambos. No le molestaba llevarlo, sin embargo, admitía que sentía cierta incomodidad cuando lo tenía detrás suyo, su espalda a veces solía rozar el pecho de Craig y sentía que el aliento de aquel rozaba su cabello.

No te vayasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora