La marca de Beist.

Capítulo 64. La Leder.

Mientras la mansión de las tinieblas estaba siendo restaurada, aunque ahora con el doble de seguridad, nos encontrábamos en Noruega ocupando la mansión Breivik. Mande a buscar tecnología del extranjero para la nueva casa, todos los vidrios iban a ser blindados y las cámaras de seguridad de extenderían a más kilómetros dentro del bosque.

La tecnología Force cubriría cada centímetro de la casa. Cámaras de vigilancia, rayos láser y alarmas silenciosas. Me estaba ocupando de que todo quedase perfecto para nuestra vuelta a Hidden Woods.

Mandé a traer soldados especializados de Croacia, para servirme a mi. Al clan. Necesitábamos más refuerzos después de ese último ataque.

Ivar desapareció de Noruega, mis hombres me han informado que no hay rastros ni de él ni de su patético hijo por ninguna parte, luego de eso mandé a revisar toda la mansión Breivik, esquina por esquina para verificar que no hubiese cámaras o cualquier otra cosa. Pero planeo cazarlo. Lo juro por mi hijo.

—Te sienta bien esto de ser Leder. —la risa burlona de Jacob me saca de mis pensamientos vengativos.

—No soy la leder. —ruedo los ojos saliendo del estudio junto con él. Veinte de los soldados croatas me esperaban afuera— ¿Carly aún no sale?

Desafortunadamente niega.

Suspiré una vez que vi en fila a los veinte corpulentos hombres frente a mi. La mayoría tenía la cabeza rapada pero todos parecían armas letales, eso es lo que me hizo sonreír.

—Bienvenidos. —les hablo a los nuevos integrantes.

Luego de dedicarles una charla "motivacional" me juraron lealtad a mi y al clan. Cada uno juró con su sangre serle leal a Noruega, al clan y al Leder.

Envié a diez a Hidden Woods para vigilar y proteger en caso de que algo suceda, junto con dos hombres de nuestra confianza a vigilar las obras de la nueva mansión de las tinieblas. Nada podía salir mal ni salirse de nuestras manos.

—Señorita. —Andrés apareció por la puerta escoltado por Aleksi— Mi más sentido pésame, apreciaba mucho al señor Breivik.

—Gracias. —estrecho su mano y le indico que me acompañe a la sala— Te traje aquí porque necesito que reactivemos la producción.

—Pero... —este mira a Jacob confuso.

—Soy la única que conoce la fórmula que falta, así de desde ahora trabajaras conmigo.

No titubeo. Ni voy con rodeos. Las cosas ahora son claras y no permitiré que el legado de Thomas caiga.

—La mansión está siendo restaurada y tu trabajo seguirá siendo el mismo, Andrés. Thomas solo confiaba en ti para hacerlo.

—Siempre le seré leal a este clan, señorita. —asiente— Cuente con ello.

—De ahora en más te referirás a ella como señora, Andrés. —habla Jacob con el temple frío y duro— Ganske es la nueva leder del clan.

No pedí ser nombrada como la jefa, sabía que debía hacerme cargo de alguna forma pero se siente extraño. Ese título es de Thomas y de alguna forma siento que se lo estoy arrebatando.

Pero no omití objeción, no frente a Andrés.

Este simplemente asintió y se retiró.

—Sabes que ese título me queda grande. —le digo a Jacob cruzándome de brazos una vez que Andrés desapareció— No soy  Thomas y sobre todo no soy una Breivik.

—Thomas lo hubiese querido así, Ganske.

—Así no son las leyes de el clan, lo sabes. —cojo el vaso con agua de la mesa de cristal y bebo un poco.