28.

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- Buenos días ¿Que temprano te has despertado, no?- dijo algo sorprendida Zoe, mirando dirección a la puerta entre abierta de la habitación. Eran las seis de la mañana y en las semanas que llevaban viviendo juntas Keyla nunca se había despertado a esa hora.

- La cadena del baño me ha despertado- respondió sin muchos ánimos. Sus ojos estaban medio cerrados y rojos, aún tenía las pestañas llenas de lagañas y su cabello estaba medio recogido en una coleta que había improvisado antes de levantarse.

- Siento haberte despertado- la policía se deslizó a un lado del sofá, cargando en sus manos un vaso de leche caliente a medio terminar, invitando a la rubia a sentarse a su lado.

- Está bien, tengo hoy cosas que hacer así que me vendrá bien haberme levantado temprano- y tras decir eso se puso una mano en frente de la boca y bostezó- ¿Tienes trabajo ahora? ¿No tenías ayer turno de tarde-noche?- ahora Keyla tomaba asiento justo en sitio que Zoe había dejado vacío, para que justo después de hacerlo la policía rodeara su hombro con poca sutileza y Keyla se aproximará un poco más a ella para dejarle un beso entre la mejilla y los labios.

- Ah, si, llegué a casa a la una de la madrugada ¿No te acuerdas?- Zoe rememoraba en su cabeza con un poco de diversión lo que había pasado hacía tan solo cinco horas atrás.

- Mmm... ¿Me hablaste? Nunca me acuerdo cuando estoy medio dormida- respondió sincera. Keyla no se acordaba de haber escuchado algo, mucho menos de mantener una conversación.

- Si, te dije si te podías poner a un lado de la cama.

- Oh ¿Y lo hice, no?

- Ojalá, me tocó moverte a tu lado para que nada más me acostara volvieras a ponerte en el medio.

- ¿En serio? Lo siento, no estoy acostumbrada a compartir cama.

- No te preocupes, ahora en invierno me gusta tener una fuente de calor. En verano ya veré que inventamos para no achicharrarnos.

- ¿En verano?- preguntó algo curiosa la pequeña que se había girado un poco para que Zoe la pudiera ver levantando una ceja.

- Quiero decir... si tu vives aquí, aún claro, y nosotras continuamos funcionando pues... ¿Dormiremos juntas, no?- Keyla no dijo nada, apartó la vista y miró el anuncio que estaban poniendo en la tele en aquel momento, uno cutre de champús ¿Zoe creía que lo suyo iba a durar tanto?

No había que malinterpretar a Keyla, ella deseaba que Zoe estuviera en lo cierto, pero no tenía confianza de que su especie de relación durara mucho más que unos pocos meses.

- Supongo que tendríamos que comprar varios ventiladores para no pasar calor- dijo finalmente. Zoe primero la miró asombrada y luego levantó levemente las comisuras, visiblemente aliviada.

- Entonces no tengo que preocuparme ya de un ataque de calor.

*****

El autobús se detuvo, haciendo que tuviera que cogerse un poco más fuerte de la barandilla y que un par de personas que habían detrás chocarán contra ella. Suspiró, como odiaba las horas puntas.

Antes podía ir a pie al cementerio, estaba a diez minutos de su casa, pero ahora que estaba en casa de la policía ir caminando suponía estar una hora para ir y otra volver. Así que la opción más viable era el autobús.

Una vez bajo del autobús inhaló, dejando que sus pulmones se helaran. Buscó su teléfono y vio la hora, las 9:37. Se le había hecho tarde, el jodido autobús era demasiado lento.

Aceleró el paso hasta una pequeña tienda, entró por un par de minutos y salió con unos bombones en su mano. Se quejó un poco saliendo de la tienda, diciendo que los precios habían vuelto a subir. Luego fue lo más rápido que pudo hasta la floresteria y con el dinero que le quedaba compró rosas, tres para ser exactos.

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⏰ Última actualización: Jul 02, 2023 ⏰

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