Imposible volver amar ¿Verdad?

XXXIX

Intentaba mantener la calma mediante la respiración, pero por la chucha no funcionaba, me encontraba frente a la entrada del salón azul, aunque ya le había comentado a Rusia que esto ocurriría la verdad me molestaba tener que dar explicaciones sobre lo que hago o dejo de hacer -Mierda Alemania debiste hablar conmigo antes de hacer estupideces... pero claro siempre haciendo las weas a tu modo o capaz le hiciste caso a zorronia, ni a mí me pescabai tanto saco wea- pose mi mano sobre la perilla aun dándome ánimos en el interior.

-Buenas tardes ¿quería verme señor? -

-Si, pasa- el chileno ingreso aquel salón cerrando la puerta tras de él, se acercaba a paso firme y con la mirada seria, podía ser alguien muy relajado con su gente e incluso llegando a ser regañado en algunas ocasiones, pero si era con gente del trabajo prefería mantener la distancia y ser más formal.

-Toma asiento- Solo asentí con la cabeza para luego acomodarme en el sofá libre claro que sentándome a una distancia prudente de él.

-Bien señor, cuénteme a que se debe esta repentina reunión ¿Tendremos algún político del exterior invitado? Si es así me temo que no fui informado y preferiría estar preparado antes de alguna reunión. -

-jaja tan serio como siempre Chile, relájate solo quiero tener una conversación amigable contigo y resolver unas dudas-

¿Amigable? Quien quiere seramigable con vo weon, me irrita tanto esa sonrisa suya era como la de cualquier político, tan falsa e hipócrita que me recordaba alguien, pero ¿Quién? O cierto Polonia de ahí mis ganas de sacarle la chucha -cuénteme, señor ¿Qué es lo que le interesa saber? -

-Quiero escuchar de tu propia boca cómo es eso que la relación que se había aceptado y acordado los términos con la nación alemana ya no se realizaran– por un momento solo me limite alzar una ceja, era claro que se trataba de mi matrimonio. Apoye mi espalda en el respaldo del sofá y mis manos sobre mi regazo mirando fijamente a quien solo era el gobernante de turno.

-Disculpe, pero eso es mi vida privada a la cual le recuerdo que ni usted ni ningún gobernante de turno o miembro de este tiene autoridad, como representación de estas tierras se me permite resguardar esa información- mi boca decía todo eso, pero mi choro interno decía otras cosas no muy sutiles, pero debía mantenerlo dentro mío.

Por fuera el chileno parecía estar en completa calma pero por dentro se sentía incomodo por hablar estos temas con gente del gobierno, era claro que solo lo veían por el ámbito diplomático y comercial pero para Chile era un tema bastante delicado no solo por era su vida privada sí no que también de la forma en que había terminado aquella relación -lo tengo claro pero acabamos de recibir un informe de la canciller alemana donde explica que su unión no se realizara pero que al parecer querían mantener los acuerdos ¿sucedió algo?-

Con cada palabra que salía de su boca solo iba frunciendo más el ceño ¿suceder algo? ¡claro! Como chucha quiere que me casara con un weon que me andaba pegando en la nuca cuando decía que trabajaría el ¡ctm! ¡Ser el weon cornuo que se reían en su cara! Al menos el saco wea se dignó a ser discreto en el informe, aunque claro el quedaría como el hoyo. Que lindo seria escupir todo eso, pero no le daré el lujo de que sepa cosas de mí ya que cualquier cosa pueden usarlo en tu contra con tal de controlarte -estoy al tanto, pero le repito es mi vida privada y las relaciones que mantenemos con el pueblo alemán no cambiaran solo porque el matrimonio no se realizara, por ende, encuentro innecesario esta conversación así que si no hay nada más que hablar me retiro-

-Detente un momento- Me estaba poniendo de pie para poder retirarme, quería terminar pronto lo que me quedaba de pega y así tener tiempo para hablar aunque fuera un ratito con mi ruso pechocho especialmente cuando anda con carita tuto que se ve tan lindo pero este caeza' talco le gusta wearme parece -¿necesita algo más señor?-