no me importa ser invisible - «quisiera créermelo»

capitulo 32

ONU miraba aquello entristecido, entendía que pasaba. Cuba era todo lo que Puerto Rico tenía y Puerto Rico era lo más importante para Cuba. Era evidente el enorme cariño que se tenían. Pero que podía hacer Puerto ante eso? Nada, solo llorar por Cuba. Que podía hacer Cuba? Sus opiniones eran limitadas por su propia salud mental y ya se estaban acabando las opciones.

Aquel líquido negro seguía escurriendo por la boca del puertorriqueño pero eso no le importaba. Varias grietas se formaron al rededor de su cara, no le importaba. Solo se preocupaba por Cuba y qué lloraba por su culpa.

Rápidamente los doctores se percataron de las nuevas grietas. Y fueron a atenderlas. Puerto solo pudo abrazar su peluche confundido, asustado y llorando.

(...)

Ya había pasado todo, Puerto  estaba sentado en la camilla, en silencio. Cuba a su lado quería acompañarlo. Después de unos minutos llegó un enfermero con una bandeja de comida.

- (oh no...) - pensó Puerto.

Las veces anteriores pasaban nutrientes por vía intravenosa al no tener fuerzas ni para levantar el tenedor pero ahora tendría que comer y no habría forma de esconderse a vomitar.

El enfermero dejo la bandeja frente al pequeño país y le sonrió entregándole los cubiertos.

- gracias... - dijo por lo bajo.

Puerto con toda la dificultad del mundo pudo comer a penas 1/4 del plato. Antes de que le dieran náuseas. Tomó el bote de basura que estaba al lado de la cama y vómito. Cuba se preocupo, España se asustó y ONU se sorprendió.

- Puerto estás bien? La comida estaba en mal estado? - preguntaba Cuba.

- cómo puede ser que en un hospital den comida en mal estado! - se quejó España

Puerto negó.

- La comida no está en mal estado... - dijo con la voz quebradiza.

- qué?

- la comida no está en mal estado... - sollozó - soy tan inútil que ya ni comer puedo... Estoy cansado... - lloraba cubriendose el rostro - solo quería dejar de existir... Dejar de ser una molestia... Pero ni eso puedo hacer bien... Estoy arto... De ya no poder hacer nada... Llevo mínimo un año sin poder comer adecuadamente... - confesó llorando a mares - y-yo... Lo siento... Por favor... Perdón por ser tan patético... - en eso sintió a Cuba abrazándolo - lo siento... Lo siento Cuba... Lo siento...

- no es tu culpa, prometo que pronto te recuperarás -

Puerto Rico escondió su rostro entre la ropa de Cuba llorando.

España lo miraba con pena. Si no hubiera abandonado a su hijo probablemente nada estaría pasando. Pero a quien quería engañar, todos ,y probablemente exceptuando uno que otro, tenían cierta culpa por el estado actual de Puerto Rico. Él seguía esforzándose por mejorar pero día tras día quedaba más cansado. Le era difícil hablar de esos temas porque sentía que se victimisaba demasiado y quisiera encontrar algo que allá echo mal para provocar todo esto. Pero por más que buscara no encontraba nada. Su mente era un caos y la unica forma que habría de arreglarlo a el sería ir al pasado y arreglar todo desde en comienzo pero, no hay una máquina del tiempo. Por lo tanto esa opción sería descartada totalmente, de echo ni pensable.