El diario de J. Potter » Sirius & Regulus Black

Capítulo 13: jealousy, jealousy

Hola! antes del capítulo quería comentarles, por si no leyeron la publicación de mi perfil, que no estoy actualizando porque estoy editando la historia para que sea más agradable a la hora de leerla. La trama seguirá siendo la misma, lo que cambia es la forma de relato: primero lo que lee Harry (o cualquiera) en el diario y después les muestro un flashback desde un punto de vista omnisciente. 

Esto no es un capítulo nuevo, simplemente separé el capítulo doce en dos partes. Me alegra leer que les gusta y por eso quiero mejorarla. Gracias por esperar JAJA 💋💕 

Ahora sí:

''Sábado 17 de septiembre, 1977:

Ya tengo un plan para bajarles los humos a Regulus Black y a Severus Snape, me cansé de ser como una pared, me cansé de solo leer y observar lo que ellos hacen, merezco ayudar en las pociones y que me escuchen. Es la hora de imponerse. Se me ocurrió en Hogsmeade mientras esperábamos que Ámbar termine su cita con Sirius para poder irnos. Sabrina y Zaira lo escucharon atentas, casi encantadas; hasta mis amigas están hartas de ellos y eso que solo escuchan mis quejas.

Una poción que explote en medio de la clase no suena nada mal, recuerdo que a Regulus le encantaba ver como mis pociones explotaban, ahora es su turno.

No van a seguir tomándome por tonta.

Pero dejamos de lado mi tema cuando Ámbar volvió a nuestra mesa y se sentó en la silla que quedaba vacía; tenía una gran sonrisa y el labial rosa esparcido por todo el mentón. Tuve que tomar un trago largo de mi espumante de canela y chocolate para que mi cara no me delate, casi lo escupo al escucharla decir «creo que quiere acostarse conmigo». Y ahí me di cuenta de lo que el idiota hacía, 

Hacía con mi amiga lo mismo que con todas, cómo no lo pensé antes... y ya no me agradó para nada porque los ojos de Ámbar estaban llenos de luz, estaba ilusionada, ¿cómo le dices a tu amiga que ''su chico'' solo la quiere para una cosa?

Además por el discurso que dio, puedo asegurar que estaba algo más que ilusionada.

Por eso es que Sirius Black es algo platónico, si lo llevas a la realidad, te golpeas contra el suelo. Quizás por eso mi cerebro, inconscientemente, siempre me detuvo al imaginar cosas con él. Supongo que no es el único varón, la mayoría debe hacer lo mismo, aunque con más discreción. Sirius no es malo, simplemente es curioso. No obstante, me enfada porque conozco desde hace mucho tiempo a Ámbar, y no quiero que salga herida. ''

|FLASHBACK|

— Creo que quiere acostarse conmigo —comentó bajo para que solo sus amigas la escuchen, las tres la miraron fijo, las había descolocado y ninguna contestaba siquiera hacían ninguna mueca, hasta que Julieth tomó el valor.

— ¿No te parece conocerlo un poco más? 

— ¿Conocerlo más? Lo conozco hace como cuatro años, Julie. Es perfecto. Quiero que mi primera vez sea con alguien especial, con alguien que yo quiera. Y él es esa persona. Además, dicen que es muy bueno en la cama —murmuró, realizando muecas con sus cejas— Eso dicen. Cinco chicas.

— Umm ok.

— ¿Has estado preguntando?

— ¡Claro que no! —rio nerviosa— Esas cosas de dicen, por los baños... por los pasillos. Son cosas que se saben. 

Sabrina, Juliteh y Zaira cruzaron miradas incrédulas, casi burlonas.

- Vamos. Hago esto por todas. 

Greengrass negó divertida— No nos pongas en tu excusa de sexo casual.

— ¡No es casual! Creo que se pondrá más serio. Hablamos durante el almuerzo dos veces, porque me senté junto a él y estuvo a gusto, luego pasamos juntos la tarde del miércoles y... Y ahora tuvimos la primera cita oficial.

Julieth giró la cabeza por encima de su hombro mientras mordía la piel de sus labios; no muy lejos estaba su hermano junto a sus tres amigos, él y Sirius reían. Tomó aire y volvió a Ámbar, sabiendo que sería inevitable. 

— ¿Sabes? Por ser tu primera vez, quizás deberías hablar con madame Pomfrey en su despacho...

— Tuve ya una charla con mi madre este verano, Potter. 

Zaira ladeó su cabeza, y como si pudieran hablarle por telepatía, no se apartaban la vista con Julieth, parecían contestarse con muecas poco disimuladas. Sabrina negó notándolo.  

— Son dos arpías, en vez de felicitarla, la hacen poner más nerviosa. No están siendo amigas ahora mismo. 

— No me mal interpreten, solo quiero que tome los recaudos.

— Y que no salga con el corazón roto —agregó Greengrass—. No sean tontas, todas lo conocemos, desde cuarto que ha coqueteado con toda la que se le cruce.

Julieth hizo una mueca «con ella no». 

 — Exacto. Pero si, nos pone feliz porque sabemos cuanto te gusta... —aseguró Julie, mostrándole una sonrisa, bebiendo más espumante. 

— ¡Cuéntanos más! —chilló Sabrina— ¿En dónde será y cuándo?

— La próxima vez que vengamos a Hogsmeade, dentro de dos semanas, asumo. En una de las habitaciones de la Cabeza de Puerco —respondió. 

Julie lanzó sus ojos a un costado, ninguna lo notó, pero esa hoja de su diario terminaba con:

''... Ese lugar es una pocilga''

☠♡☠♡☠♡☠

Parvati y Lavander se miraron asintiendo, muy sonrientes para el comentario que haría Parvati al respecto:

— Dijo todo eso de Sirius porque está celosa de su amiga, obviamente. 

— Total. Le gusta y lo tiene la otra. ¿Qué más diría? ''¡que bien!''  Yo no lo creo. 

— Ustedes dos saben que están leyendo sobre el asesino que acecha al colegio y a Harry, ¿cierto? —ambas miraron a Hermione, que tenía una de sus cejas altas, juzgándolas— ¿Qué es lo que las emociona tanto? 

— Granger, presta atención, está relatando una historia de amor y venganza. Olvídate de quién se trata, y léelo como si no la conocieras, es atrapante. 

— Dejen marcada la página en la cuál  lo encontraron porque Harry se enfadará.

— ¿Quieres acercarte y escuchar con nosotras el siguiente capítulo? —preguntó Parvati con un juego de cejas. Hermione suspiró, agarrando a Crookshanks y sentándose en el sillón junto a ellas.

— Sí.