Géminis [Zodiaco #1] ✔️

♊CAPÍTULO -13-♊

✨Run Génesis, Run ✨

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GÉNESIS 💋

— Igual podemos pelear — seguía insistiendo Jeremy.

— Cabeza de músculo — comentó Yenna mirando en su dirección.

— ¿Acaso no te das cuenta que la mayoría aquí son signos de tierra? — pregunté.

— Y eso que, hay dos de fuego y tu eres de aire, Cox — le restó importancia a lo que ocurría.

— ¡Para ellos es peor! — le gritó su hermana exasperada.

— ¡SIGUEN IGNORANDOME! — volvió a gritar el hombre.

— Ah ya superalo — le mostré el dedo del medio y eso lo hizo enfadar más, incluso desde donde yo estaba podía notar como se marcaba la vena en su cuello — Uy, eso va a explotar...

— Génesis ya cállate, por favor — me sujetó Archie por el brazo.

— ¡PAGARÁS POR ESTA HUMILLACIÓN MOCOSA! ¡OJALATA ATACA! —

Esa enorme bestia, comenzó a moverse en nuestra dirección y sus ojos brillaron en un color turquesa, levantó uno de sus brazos en nuestra dirección y abrió su enorme mano de la cual emergió un cañón que enseguida se iluminó.

— Ay no... — escuché a Viviane.

— ¡Corran! — oímos la orden del entrenador y de inmediato corrimos en dirección a la salida de emergencia.

Unos rayos azules eran lanzados y lograbamos esquivarlos pero con dificultad, pudimos salir por la salida de emergencia y nos detuvimos en el inicio del bosque que está detrás de la academia.

— Uff, creo que nos salva... — Archie no pudo terminar de hablar por que esa enorme ojalata atravesó la estructura, haciendo que se viniera abajo.

Un grito desgarrador sonó desde dentro del mounstro de metal y las nubes se juntaron sobre nosotros, comenzando a caer una fuerte lluvia, esto debe ser gracias a la esencia de Ram que tiene esa cosa. Los signos de tierra que estaban a nuestro lado junto con los de fuegos comenzaron a debilitarse debido al agua, incluyéndome.

— Debemos correr — escuché decir a Seth, pero yo estaba petrificada.

— ¡Run Génesis, Run! — salí de mi trance y miré a mi mejor amigo con el ceño fruncido.

— ¿Referencia a Flash? ¿Justo ahora? — me reí.

— No pude evitarlo pero funcionó — sonrió orgulloso.

— Eh, chicos... No deberían jugar en un momento así... — dijo Thea.

— Corran, ahora — el entrenador se puso frente a nosotros — lo detendré lo más que pueda.

— Papá... Te debilitas... — ver a mi amiga preocupada me estrujó el corazón.

— Tengo una idea — recordé lo que había hecho en la clase, si amplificaba ese poder, podía lograr que las nubes estuvieran lo bastante lejos de aquí, así esa cosa no podría volver a reunirlas, no en un buen rato.