MORT VIVANT | 1

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Gimpo era una ciudad solitaria ubicada en la provincia de Gyeonggi al norte de Corea. Solo tenía una población total de 232.364 personas. Si ya de por sí la ciudad era solitaria ahora parecía un pueblo fantasma.

Vieron a varios mordedores paseándose por la carretera. Sus cuerpos estaban en completa descomposición al no tener carne humana que pudieran comer.

Hoseok miró todo con el ceño fruncido. Ya sabía porqué decidieron hacer el refugio en ese lugar. Yoongi estaba dormido, pues él mismo había dicho que se encontraba bastante cansado, Jongsuk y Hongjoong no dejaban sus armas de lado, pendientes de cualquier movimiento que el peli negro hiciera.

-Esto da mucho miedo.- dijo Jungkook impulsandose para quedar en el medio de entre los dos asientos delanteros.- me da la impresión de como si estuviéramos en Silent Hill.

-Mi madre una vez propuso venir a vivir a Gimpo, pero a la final decidimos que no ya que somos más del centro.- contó Namjoon.

Hoseok no sabía con exactitud cómo era el refugio de Gimpo, pero se estaba guiando con las indicaciones que Moonbyul le dio.

“Son cuatro edificios de treinta pisos, de color blanco y ventanales grandes. Están en una especie de residencia parecida a la de Yeosu, pero en esta ocasión los edificios se conectan por pasillos exteriores”. Eso había dicho la peli gris exactamente, así que cuando Jung vio los dichosos edificios esbozó una sonrisa de triunfo.

-Hemos llegado.- anunció. Yoongi se levantó y los demás se pusieron en alerta.- esos cuatro edificios es Gimpo.

-Sokcho es mejor.- dijo Jongsuk.

-Claro que es mejor, estás rodeado de pura tecnología y lujos.- Jungkook sonrió burlón.- entonces llegamos.

-Todo está raramente despejado.- Hongjoong dijo a la vez que miraba por la ventana. No se veían mordedores por ningún lado, era como si no existieran.

-Tengo entendido que ellos limpian los alrededores del refugio, para evitar alguna tragedia o algo por el estilo.- explicó Lee.

Todos se quedaron en silencio apenas el auto se detuvo unas calles antes de los edificios. Ahora les tocaba ejecutar el plan, ahora tenían que hacer lo posible para sobrevivir dentro de aquel lugar.

El plan no era fácil. Tenían que infiltrarse en las instalaciones sin que nadie los viera, arriesgar sus vidas y correr por si alguien los descubría. Porque Moonbyul se los había dicho, Taeyong de seguro ya había dado la orden de matarlos si los veían cerca.

En ese momento su mayor preocupación no eran los mordedores, sino los que estaban dentro de Gimpo.

Bajaron con sus armas en mano a pesar de que no habían mordedores cerca. Hoseok les daba las indicaciones, les señalaba los sitios por donde debían caminar y cuando tenían que agacharse. Apenas se acercaron más a los cuatro edificios pudieron divisar a tres hombres con escopetas en sus manos vigilando las puertas de entrada.

-¿Hay alguna puerta por donde podamos entrar sin que nos vean?- preguntó Yoongi. Jongsuk asintió señalando.

-¿Ves esos árboles grandes? Esconden las puertas de emergencia, por ahí podemos pasar.

Como si fuera por obra de los dioses los tres hombres se tocaron el oído izquierdo presionandolo, como si tuvieran un micrófono. Luego de un par de segundos más entraron por la puerta que estaban cuidando. Aprovecharon ese momento para correr hacia los árboles, rogando que no hubieran cámaras que grabaran lo que sucedia en el exterior.

Una vez llegaron a la puerta la abrieron con cuidado de no hacer mucho ruido. Se encontraron con unas escaleras, todo estaba oscuro y olía a humedad. Unas ligeras gotas de agua que  golpeaban contra el suelo hacían eco en el lugar.