Casada con el Diablo

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" La muerte era paz y yo, deseo la paz."

- Sabes la historia del Dark Love?- pregunto mientras sostengo la flor en mis manos, en cuanto terminan de enterrar a mi padre dejo la flor en su tumba y otra en la de mi madre.

- La Historia del Dark Love es originaria de la mafia, no saben quien la vivió pero todos la cuentan como si fuera una enseñanza. El Dark Love es la muestra de un amor verdadero que en su momento,fue tan puro y verdadero pero por el dolor se volvió oscuro. Un Dark Love, Morgan, es algo que nadie desea.- Liam me ayuda a llegar a tierra firme mientras que yo acaricio mis palmas.

- Alexander se va a casar con Ágata, eso no me hace merecedor de un Dark Love?- pregunto ganando su mueca.

- Solo uno sufre el Dark Love señorita, el otro sufre, la muerte. Un Dark Love es un amor que termina en la muerte y en quebrantar su alma.- habla abriendo la puerta del coche para dejarme entrar.

Me quedo viendo el cristal mientras el tarda en entrar por hablar por teléfono. Ya tuve dos muertes en menos de dos semanas, no podría soportar otra más.

- Señorita, debemos ir directo a la mansión.- Liam entra al auto con gran rapidez, lo miro confundida hasta que me da una mirada y enciende el coche. — Se adelanto el día de la boda.— menciona, yo solo me quedo callada dejando que el conduzca mientras llama al hotel pidiendo que lleven las maletas al avión, miro mis manos con cierto dolor.

El anillo en mi dedo brilla en cuanto lo pongo en el sol, una sonrisa amarga aparece en mi rostro por lo que solo me queda cerrar mis ojos y confiar en que todo es una pesadilla y pronto despertaré.

La realidad era cruel.

Mi realidad.

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Las personas hablan sobre la importancia del amor, sobre la importancia de la vida y sobre encontrarse a uno mismo.

En toda mi vida, jamás pude apreciar un amor verdadero o un amor que  no me lastimara.

Incluso, algo tan importante como la vida decidí terminar.

- No puede pasar.- alzo miso ojos viendo al guardia, sonrió un poco pensando en que los guardias la tenían  conmigo y sin dejarme pasar.

- Soy Morgan Ivanoov. - digo viendo como se aparta, dejándome pasar.

La importancia de encontrarse a sí mismo, nisiquiera se quien soy.

Soy Morgan.

No una Ivanoov.

No la hija de un Duque.

No la amiga que ve a sus amigos fallecer ni la hija que vio a su madre muerta.

Soy Morgan.

La que se enamoro del diablo y no vivió para contarlo.

- Yo me opongo. - digo firme, la señora Ivanoov grita que me saquen pero en cuanto lo intentan Liam saca su arma apuntando a la cabeza de Alexander, sonrió.

O gano.

O nos morimos todos.

Saco los papeles que me dio mi padre para caminar hasta donde Alexander que me mira sin emoción, mi corazón late al entender que el brillo de sus ojos es por mi.